Sunday, February 27, 2022

El seminario del CCE “Visión de futuro: México 2042” inicia mañana

El seminario del CCE “Visión de futuro: México 2042” inicia mañana

 

Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

La combinación de populismo, pandemia y guerra es una receta para el desastre. Es momento de detenernos a pensar seriamente sobre el futuro de México.

 

La OCDE reconoció hace unos días que una política macroeconómica sólida ayudó a México a superar la recesión inducida por la pandemia. Pero aún quedan desafíos para garantizar que la recuperación sea sostenible y beneficie a todos. ¿Qué se necesita? Una agenda integral de reformas para impulsar la inversión y revertir el bajo crecimiento de la productividad. 

 

Ojalá que el gobierno de la 4T escuche que, aunque son muy importantes, no basta con los programas sociales. Los expertos de la OCDE dicen que un crecimiento más fuerte y más empleos, combinados con un mayor gasto social, ayudarían a reducir la pobreza y mejorar la cohesión social.

 

La OCDE reconoce la gestión innovadora de la deuda, una política monetaria sólida y un tipo de cambio flexible como los tres elementos que limitaron el impacto económico de la pandemia y aseguraron el acceso a los mercados internacionales de capital. 

 

México tendría un gran potencial para convertirse en una economía de alto crecimiento, con mejores niveles de vida para todos. Pero esto requiere visión, estrategia, políticas públicas inteligentes y su implementación eficaz. Reactivar la inversión privada y revertir el bajo crecimiento de la productividad deberían ser las prioridades del gobierno de la 4T.

 

¿Qué ha obstaculizado la inversión privada? Sin duda, la principal barrera es la incertidumbre. Los inversionistas nacionales e internacionales no tienen claridad de las reglas del juego, ni del diseño ni de la implementación de las políticas públicas. La incertidumbre aumentó especialmente tras la iniciativa de contrarreforma constitucional en materia eléctrica. 

 

Es urgente imaginar lo que haremos hoy para que México se transforme en los próximos 20 años. El Consejo Coordinador Empresarial convocó al seminario “Visión de futuro: México 2042” para mañana lunes y el martes. Es importante que todos participemos. No hay que pagar nada. Nos podemos registrar hoy mismo en https://bit.ly/CCEMEXICO2042

 

Aquí está un resumen del programa:

 

 

Lunes 28 de febrero

 

 

09:00 – 11:00

 

Los empresarios y México

 

• Carlos Salazar, Presidente CCE

• Antonio del Valle, Presidente CMN

• Cesar de Anda, Inova Alimentos y COINCyDES

• Héctor Aguilar Camín, Director Revista Nexos

• Gabriela de la Riva, Presidenta De la Riva Group

• Francisco Abundis, Director Parametría

 

Moderador: Alberto Bello, CNN México, Centroamérica y Caribe

 

 

11:30 – 13:30

 

Organizaciones empresariales en el siglo XXI

 

• José Medina Mora, Presidente COPARMEX

• Elena Suárez, Business Europe

• Bosco de la Vega, ex Presidente CNA

• Carlos Elizondo Mayer-Serra, profesor del TEC de Monterrey

• Javier Treviño, Director General Ejecutivo CCE 

 

Moderadora: Alicia Salgado, Enfoque Noticias y Excelsior

 

 

16:00 – 18:00

 

¿Qué necesita México para crecer?

 

• Rolando Cordera, PUED de la UNAM

• Ildefonso Guajardo, Diputado Federal y ex Secretario de Economía

• Tania Ortíz Mena, Presidenta México Sempra Infraestructura

• Lourdes Melgar, Investigadora MIT y ex Subsecretaria de Energía

• María Ariza, Directora General BIVA

• José Abugaber, Presidente CONCAMIN 

 

Moderador: Salvador Camarena, El Financiero

 

 

Martes 1 de marzo

 

 

09:00 – 11:00

 

Dimensión social para el bienestar y la movilidad

 

• Roberto Vélez, Director CEEY

• Raj Sisodia, Profesor Distinguido de Empresas Conscientes, Tec de Monterrey

• Sofía Belmar, Presidenta AMIS

• Gina Diez Barroso, Grupo DiArq

• Odracir Barquera, Dir Gral de Estrategia CCE 

 

Moderadora: Rossana Fuentes Berain, México Media Lab S21

 

 

11:30 – 13:30

 

Democracia e instituciones fuertes

 

• Sabino Bastidas, Analista político

• Diego Valadés, Investigador Emérito Instituto de Investigaciones Jurídicas UNAM

• Ana Laura Magaloni, Abogada constitucionalista y Profesora del ITAM

• Jorge Buendía, Director Buendía y Márquez

• Laura Rojas, Consejera Senior en Emant Consultores 

 

Moderadora: María Amparo Casar, Analista Política

 

 

16:00 - 18:00

 

MiPyMEs y emprendimiento como factor de desarrollo

 

• Juan Carlos Ostolaza, Director Centro de Competitividad de México

• Irma Marcela León Garza, Industrias Lowe

• Francisco Cervantes, ex Presidente de CONCAMIN

• Eduardo Garza T Junco, ex Presidente de CAINTRA NL

• Fernando Hiraoka, Líder Práctica FUEL de McKinsey México

• Pedro Martínez, Director de Operaciones StartupLab MX 

 

Moderador: Luis Miguel González, El Economista

 

 

Las “transformaciones” impulsadas desde el gobierno de la 4T han generado un nuevo ambiente político muy complicado. Durante los últimos tres años han cambiado muchas de las políticas públicas y regulaciones. Se ha introducido un factor de alto riesgo para las empresas.

 

Las organizaciones del sector privado tienen que planear y actuar estratégicamente. Aunque algunos quisieran la confrontación y la firmeza, y se sientan satisfechos cuando ven un desplegado en un periódico, a una plana, a colores, firmado por una organización empresarial, el efecto de eso es casi nulo. Ya no es como antes.

 

Hoy no basta con publicar estridentes comunicados de prensa. Tampoco es suficiente con buscar el acceso aislado a los funcionarios públicos. Las organizaciones empresariales exitosas son las que tienen una estrategia eficaz integral de relacionamiento con el gobierno federal, los gobiernos estatales y municipales, con las comunidades.

 

En el México de 2022, está en juego la continuidad de las operaciones de los negocios, la creación de valor de las empresas, su rentabilidad. El éxito dependerá de quien sepa entender y reconciliar exitosamente los dilemas y contradicciones de las políticas públicas. El éxito dependerá de quien logre construir puentes, mantener la capacidad de interlocución, asegurar siempre un lugar en la mesa de negociación. 

 

No sólo se trata de abrir puertas. Se requiere una nueva estrategia corporativa ante el cambio. El riesgo político es más peligroso. Vivimos el entorno gubernamental más complicado en muchos años. Se desarticuló el modelo general de equilibrio político. Las empresas son ahora más vulnerables que antes. El costo de la acción colectiva es menor. El activismo social puede ser disruptivo. 

 

En este escenario, se requiere anticipar, pensar fuera de la caja y hacer nuevas propuestas innovadoras para crear valor público y legitimidad. La sociedad y el gobierno esperan que las empresas jueguen un nuevo papel social. Las empresas ya no son solamente responsables ante las exigencias de sus accionistas. Ahora lo son ante todos los “stakeholders” (grupos de interés) clientes, empleados, proveedores, comunidades locales, servidores públicos, legisladores.

 

“Legitimidad y apoyo” es lo que se tiene que construir en la estrategia de las empresas y de las organizaciones. Vamos a necesitar una licencia implícita o explícita de la comunidad para operar. Habrá un “juicio social” sobre las empresas. Ese juicio se traducirá en leyes, reglamentos y regulaciones. También se podrá convertir en acciones sociales colectivas como huelgas, protestas, boycotts, resoluciones, códigos de conducta, estándares prácticos, morales o legales. Hay un precio por acatar o no acatar.

 

Las organizaciones empresariales no son partidos políticos. Desde las organizaciones del sector privado, debemos hacernos siempre tres preguntas: ¿Cuál es el valor público que podemos crear? ¿Cuáles son las fuentes de legitimidad y apoyo que se requieren? ¿Cuáles son las capacidades operativas que tenemos?

 

El CCE es una organización pequeña, eficiente, horizontal, esbelta, pero a la vez robusta, que actúa con orden y eficacia. El principio esencial es la colaboración. El compromiso fundamental es la defensa y la promoción de los intereses de las organizaciones del sector privado.

 

A través del trabajo de sus comisiones, se definen, diseñan e integran propuestas de políticas públicas que después se presentan y negocian con el gobierno. El CCE cuenta con los mejores centros generadores de ideas y análisis político, económico, social y ambiental. 

 

El CCE monitorea, anticipa, propone y defiende iniciativas ante el poder legislativo. Elabora el mejor análisis internacional y ayuda a la inserción de las organizaciones y de las empresas en el mundo. Está continuamente perfeccionando su acercamiento con la sociedad a través de sus fundaciones.

 

El Consejo Coordinador Empresarial crea valor público. Por eso convocó al seminario “Visión de futuro: México 2042”. Ojalá que muchos participemos en esa discusión.

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/el-seminario-del-cce-vision-de-futuro-mexico-2042-inicia-manana/

Thursday, February 24, 2022

¿Qué está pensando Putin?

 

 

¿Qué está pensando Putin?


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

Será difícil una solución pacífica a la crisis de Rusia y Ucrania. Ucrania declaró un estado de emergencia de 30 días, llamó a sus reservas militares y pidió a sus ciudadanos que abandonaran Rusia. Seguramente, habrá una gran afluencia de refugiados en Europa. El impacto en los mercados ya se está dando y podría agravarse. Las sanciones económicas anunciadas tendrán un impacto más allá de los países sancionados.

 

Es momento de unidad en Occidente. Las acciones de Vladimir Putin son desconcertantes, ambiciosas, peligrosas y destructivas. Putin no está capturado por el inmediatismo. Se desplaza en el uso estratégico del tiempo. Hay amenazas, fintas y desinformación. Putin ya declaró nuevos supuestos países en territorio que pertenecía a sus vecinos.

 

¿Acaso la motivación de Putin tiene que ver con la OTAN o con la seguridad de Rusia? Todo indica que no. Putin está convencido de que Ucrania es parte de Rusia. 

 

Muchos de nosotros no imaginábamos que pudiera llegar a darse una invasión de un estado europeo soberano a estas alturas del siglo XXI. Es increíble que Putin siga dando sufrimiento a su país. ¿Qué podría justificar estas acciones?

 

Debemos reconocer que el presidente de Estados Unidos ha hecho un manejo inteligente de la situación. Biden mostró resolución. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, canceló una reunión programada para esta semana con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov. La razón es que, desde la perspectiva estadounidense, Rusia no está preparada para tomar medidas demostrables para brindarle a la comunidad internacional algún grado de confianza, ni toma en serio la reducción de la tensión y ni la búsqueda de una solución diplomática.

 

Las sanciones contra Rusia tendrán impactos económicos de gran alcance para Europa y para Estados Unidos también. El costo de la energía aumentará. Rusia podría tomar otras represalias a través de ataques cibernéticos.

 

Nadie puede justificar una invasión de un vecino más débil. 

 

Timothy Snyder, profesor de historia de la Universidad de Yale, escribió en el Financial Times que Ucrania ha sido independiente desde 1991, desde el final de la Unión Soviética. En 2014, Rusia invadió, ocupó y anexó gran parte del territorio ucraniano. Y el lunes por la noche, el presidente ruso Vladimir Putin ordenó tropas en el este de Ucrania.

 

Tres ideas de Snyder nos ayudan a entender parte del problema:

 

1.      “El presidente de Rusia justificó la violencia con una extraña diatriba sobre el pasado que puso de relieve las afirmaciones que Putin hizo en julio pasado en un largo ensayo: Ucrania no existe; no ucranianos; todo es simplemente parte de Rusia, o inventado por Rusia, por lo tanto, debe ser reclamado y controlado y, si es necesario, aniquilado por Rusia. Putin no es historiador. Ucrania tiene su propia historia distinta y fascinante y los ucranianos tienen tanto derecho a un futuro como cualquier otra persona”.

 

2.     “Putin piensa que todos los que hablan ruso deben ser rusos y necesitan su protección. Casi todo el mundo en Ucrania habla ruso. Aquí hay un problema más profundo. Sea cual sea el idioma que hablemos, es lo que decimos lo que importa. Nuestra identidad no debe ser decidida por tiranos distantes, cualquiera que sea el idioma que hablen”.

 

3.     “La historia no puede detener una guerra. Pero nos puede ayudar, al menos, a entender cómo se empieza, que es con soberbia y mentiras”.

 

Leí también el extraordinario artículo de la exsecretaria de Estado Madeleine Albright, publicado ayer en The New York Times. ¿La conclusión? Putin está cometiendo un error histórico. Albright también nos ayuda a entender mejor la crisis. Aquí transcribo cuatro ideas centrales de su editorial:

 

1.     “Putin es pequeño y pálido, tan frío que parece casi un reptil”. “Putin está avergonzado por lo que le pasó a su país y está decidido a restaurar su grandeza”.

 

2.     “La afirmación revisionista y absurda de Putin, de que Ucrania fue “totalmente creada por Rusia” y efectivamente robada del imperio ruso está totalmente en consonancia con su cosmovisión distorsionada. Lo más perturbador para mí: fue su intento de establecer el pretexto para una invasión a gran escala. Si lo hace, será un error histórico”.

 

3.     “Durante años, Putin ha buscado pulir la reputación internacional de su país, expandir el poderío militar y económico de Rusia, debilitar a la OTAN y dividir a Europa (mientras abre una brecha entre ésta y Estados Unidos). Ucrania aparece en todo eso”.

 

4.     “En lugar de allanar el camino de Rusia hacia la grandeza, invadir Ucrania aseguraría la infamia de Putin al dejar a su país diplomáticamente aislado, económicamente lisiado y estratégicamente vulnerable frente a una alianza occidental más fuerte y unida”.

 

Es casi seguro que la agresión de Putin llevará a la OTAN a reforzar significativamente su flanco oriental. Habrá fuerzas en los Estados Bálticos, Polonia y Rumania. La resistencia ucraniana será apoyada por Estados Unidos y la Unión Europea. No van a permitir una repetición de la anexión de Rusia de Crimea en 2014.

 

Sin embargo, Putin es paciente y pragmático. La confrontación actual lo ha dejado aún más dependiente de China.

 

¿Qué está pensando Vladimir Putin? El lunes pasado dijo que él cree que Ucrania es un país ilegítimo, que existe en una tierra histórica y legítimamente rusa. Afirmó que Ucrania en realidad nunca tuvo tradiciones estables de estado real. 

 

¿Qué hubiera pasado si Ucrania tuviera un gobierno pro-Putin? Probablemente sería reconocida por Putin como un estado soberano.

 

Recuerdo que en el 2005 Putin declaró que “el colapso de la Unión Soviética fue un gran desastre geopolítico [en que] decenas de millones de nuestros conciudadanos y compatriotas se encontraron fuera del territorio ruso”.

 

El argumento central del discurso de Putin del lunes pasado es que Ucrania y Rusia son, en términos históricos, esencialmente inseparables. El nacionalismo ucraniano, en su opinión, es una infección introducida por los bolcheviques; cuando la Unión Soviética colapsó y las repúblicas desde Ucrania hasta Estonia y Georgia declararon su independencia, el virus los mató.

 

Putin teme y advierte que Ucrania adquirirá armas nucleares con la ayuda de Occidente, se unirá a la OTAN y, en última instancia, servirá como plataforma de lanzamiento para un ataque estadounidense contra Rusia.

 

En la mente del presidente ruso, existe una conexión perfecta entre el nacionalismo ruso y los intereses de seguridad rusos. Putin cree que el actual gobierno ucraniano amenaza a Rusia por razones ligadas a su pasado imperial. Restaurar el control ruso sobre los territorios que cree que le pertenecen legítimamente sería una forma de poner fin a la amenaza.

 

Pero el hecho de que Putin haya abrigado durante mucho tiempo agravios nacionalistas no aclara hasta dónde está dispuesto a llegar en la búsqueda de sus fines.

 

¿Será que Putin realmente quiere que Occidente escuche sus preocupaciones sobre Ucrania y venga a la mesa de negociaciones? 

 

¿O el enfoque de Putin es una obsesión con Ucrania como estado ilegítimo que hace que sea casi imposible de imaginar negociaciones serias? 

 

¿Es casi inevitable una invasión total? ¿Tiene Putin el apoyo de sus conciudadanos?

 

Cualquiera que sea la respuesta a cada uno de estas interrogantes, debemos comprender bien el sentido del agravio histórico y la forma en que eso moldea la visión de Putin de la supuesta "amenaza" de Ucrania. Por eso Putin se arriesga tanto en sus movimientos de los últimos días. Debemos entender mejor la visión del mundo que tiene Putin; y tomarlo en serio.

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/que-esta-pensando-putin/

Tuesday, February 22, 2022

El informe de la OCDE sobre México

 

 

El informe de la OCDE sobre México


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) dio a conocer ayer su informe económico sobre México (Economic Survey of Mexico 2022). Proponen una agenda integral de reformas que ayudaría a optimizar la calidad de la recuperación y el crecimiento a mediano plazo.

 

La OCDE reconoce que las políticas macroeconómicas sólidas ayudaron a México a superar la recesión inducida por la pandemia. Pero aún quedan desafíos para garantizar que la recuperación en curso sea sostenible y beneficie a todos.

 

¿Qué se necesita? Una agenda integral de reformas para impulsar la inversión y revertir el bajo crecimiento de la productividad. Ojalá que el gobierno de la 4T escuche que no basta con los programas sociales. Los expertos de la OCDE dicen que un crecimiento más fuerte y más empleos, combinados con un mayor gasto social, ayudarían a reducir la pobreza y mejorar la cohesión social.

 

La OCDE reconoce la gestión innovadora de la deuda, una política monetaria sólida y un tipo de cambio flexible como los tres elementos que limitaron el impacto económico de la pandemia y aseguraron el acceso a los mercados internacionales de capital. El desempeño de los sectores manufactureros, agrícolas y de servicios son los que han apoyado la reactivación. La OCDE proyecta que el PIB de México aumente un 2.3 % este año y un 2.6 % el próximo año.

 

México tendría un gran potencial para convertirse en una economía de alto crecimiento, con altos niveles de vida para todos. Pero esto requiere visión, estrategia, políticas públicas inteligentes y su implementación eficaz. La OCDE dice que se requiere una agenda ambiciosa e integral de reformas.

 

El estudio presenta una serie de recomendaciones para mejorar las perspectivas de crecimiento a mediano plazo. Para reforzar el marco de política macroeconómica, México debe mantener su compromiso con la solidez de las finanzas públicas y la sostenibilidad de la deuda y satisfacer las crecientes necesidades de gasto mediante el aumento de los ingresos fiscales. El estudio identifica propuestas que tienen el potencial de aumentar los ingresos tributarios en un 3.5% del PIB, incluso a través de la eliminación de exenciones ineficientes y regresivas y una reforma del impuesto a la propiedad.

 

Reactivar la inversión privada y revertir el bajo crecimiento de la productividad deberían ser las prioridades del gobierno de la 4T. Para lograrlo, se deben mejorar las regulaciones comerciales, impulsar la competencia, reducir la informalidad y la corrupción e intensificar los esfuerzos para cumplir con los objetivos de emisión de gases de efecto invernadero.

 

Hemos dicho que los programas sociales son muy importantes, pero que no son suficientes. El gobierno de la 4T debe continuar impulsando el gasto social en educación y en salud. Pero no debe olvidar la inversión pública para apoyar la recuperación y mejorar las oportunidades de todos los mexicanos. Ampliar el acceso al sistema financiero y fortalecer la digitalización dará más igualdad de oportunidades y ayudará a fomentar el crecimiento.

 

El gran desafío pendiente es la reactivación de la inversión. La inversión ha estado silenciada desde 2015, y ha estado cayendo desde 2019. Ahí está la gran debilidad de la economía mexicana.

 

Es cierto que las exportaciones seguirán beneficiándose del fuerte crecimiento de Estados Unidos. Es cierto que una proporción cada vez mayor de la población mexicana está vacunada. Es cierto que el consumo también es un motor del crecimiento. Pero la OCDE sostiene que hay espacio para crear mejores condiciones para la inversión tanto pública como privada. 

 

Los expertos reconocen que México haya sido fiscalmente prudente a lo largo de los años, cumpliendo ampliamente sus objetivos fiscales y asegurando la sostenibilidad fiscal a pesar de tener la relación impuestos/PIB más baja de la OCDE, con solo el 16% del PIB.

 

Pero no podemos olvidar que lo anterior se ha logrado a través del recorte del gasto y de la inversión pública. La pandemia ha exacerbado las necesidades de inversión pública, ya que los sistemas de salud y educación están bajo presión. Las brechas en la infraestructura también siguen siendo significativas. El estudio de la OCDE estima que el aumento de la inversión pública necesaria para cerrar la brecha de infraestructura en México es de 1.3 puntos porcentuales del PIB al año. 

 

También recomiendan un aumento gradual de los ingresos tributarios. Dicen que esto ayudaría a responder a la necesidad de más recursos para la inversión pública y fortalecer así la recuperación, manteniendo el compromiso con la sostenibilidad fiscal. 

 

Pero cuando hablamos de proyectos de inversión, se requiere un riguroso análisis costo-beneficio. Hace falta transparencia, estudios sociales y ambientales para asegurar una buena selección de proyectos que sean rentables desde todos los ángulos.

 

¿Qué ha obstaculizado la inversión privada? Sin duda, la principal barrera es la incertidumbre. Los inversionistas nacionales e internacionales no tienen claridad de las reglas del juego ni del diseño ni de la implementación de las políticas públicas. La incertidumbre aumentó especialmente tras la iniciativa de contrarreforma constitucional en materia eléctrica.

 

Hay un alto potencial para que se inicie un ritmo ascendente de inversiones. No perdamos de vista que estamos en plena etapa de implementación del TMEC y que la economía de Estados Unidos está en plena recuperación.

 

Afortunadamente, el Secretario de Hacienda ya identificó las tendencias de “nearshoring”, mediante las cuales es probable que las empresas busquen reducir los riesgos de interrupciones en la cadena de suministro al ubicarse más cerca de su mercado final estadounidense. Ésta será una oportunidad histórica para México. Podemos sustituir las exportaciones chinas a Estados Unidos. Hace falta el liderazgo del gobierno de la 4T para generar historias de éxito concretas en los diversos sectores industriales.

 

Convertir la oportunidad en realidad requiere certeza. Los inversionistas, tanto nacionales como extranjeros, necesitan certeza sobre los contratos existentes y la estabilidad regulatoria. Por otra parte, la mejora regulatoria a nivel estatal y municipal es indispensable para crear y hacer crecer las empresas.

 

¿Qué otras recomendaciones podemos encontrar en el estudio de la OCDE sobre México?

 

Acelerar la vacunación. Brindar más apoyo fiscal específico si la recuperación falla o la pandemia resurge. Seguir mejorando las políticas macroeconómicas. Ampliar las bases impositivas mediante la eliminación gradual de exenciones ineficientes y regresivas y mediante la reducción de la informalidad, y fomentar la recaudación de impuestos sobre la propiedad mediante la actualización del catastro, utilizando tecnologías digitales.

 

Establecer un consejo fiscal independiente y con recursos adecuados. Incrementar gradualmente la tasa de interés si la inflación no regresa a la meta del 3%. Apretar a un ritmo más rápido si las expectativas de inflación a largo plazo empiezan a subir. Fortalecer la gobernanza de PEMEX y otras empresas paraestatales alineándola con las Líneas Directrices de la OCDE sobre Gobierno Corporativo de Empresas de Propiedad Estatal.

 

Continuar fortaleciendo la lucha contra la corrupción, incluso impulsando la experiencia técnica en las agencias anticorrupción. Establecer una estrategia integral para reducir el costo de la formalización, incluida la reducción de los costos de registro de empresas en los estados y a nivel municipal. Mejorar la igualdad de oportunidades. Establecer un plan federal de seguro de desempleo. 

 

Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de forma rentable. Ampliar la base del impuesto al carbono, aumentar gradualmente la tasa y utilizar parte de los ingresos para compensar los efectos de los precios más altos de la energía. Mantener regulaciones que promuevan la generación renovable de electricidad y la participación del sector privado. Mejorar la red eléctrica implementando tecnologías de red inteligente e integrando dispositivos de almacenamiento en la red.

 

En, fin, vale la pena revisar con cuidado el informe de la OCDE en https://www.oecd.org/economy/mexico-economic-snapshot/

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/el-informe-de-la-ocde-sobre-mexico/

Sunday, February 20, 2022

Visión de futuro: México 2042

 

 

Visión de futuro: México 2042


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

México está en un parteaguas. Llegamos a un cruce de caminos, en este 2022, y la visión de los empresarios podría ayudar a definir el rumbo del país. La “transformación” que nos está recetando el gobierno de la 4T puede tomar muchas formas diferentes. Las políticas públicas pueden crear o destruir valor. Por eso, los próximos 20 años serán cruciales. 

 

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) cree que las ideas de la sociedad pueden encauzar mejor el rumbo de la nación. Por eso organizó el seminario “Visión de futuro: México 2042” para propiciar una reflexión. ¿Hacia dónde debe avanzar México en los siguientes 20 años? ¿Cómo podemos establecer una ruta de largo plazo de crecimiento y desarrollo? ¿Qué papel debe jugar el sector empresarial para contribuir en esta nueva etapa?

 

Todos podremos seguir y participar en ese foro por internet. Nos podemos registrar aquí: bit.ly/CCEMEXICO2042https://primetime.bluejeans.com/a2m/register/ketwutpu . El lunes 28 de febrero y el martes 1 de marzo se llevarán a cabo discusiones de muy alto nivel en seis mesas temáticas:

 

1.     Los empresarios y México.

2.     Organizaciones empresariales en el siglo XXI.

3.     ¿Qué necesita México para crecer?

4.     Dimensión social para el bienestar y la movilidad.

5.     Democracia e instituciones fuertes.

6.     MiPyMEs como factor de desarrollo.

 

Y el CCE no es el único que está pensando y explorando nuevos modelos económicos para un mundo en posglobalización. Dos profesores de la Escuela Kennedy de Harvard presentaron, hace unos días, un proyecto para explorar políticas económicas alternativas, que generen crecimiento equitativo y buenos empleos.

 

Dani Rodrik y Gordon Hanson, prestigiados analistas de las deficiencias de los mercados y la globalización en Estados Unidos y en todo el mundo, se preguntan: ¿qué pasaría si décadas de sabiduría económica convencional acerca de los beneficios de la globalización y la competencia de libre mercado resultan tan profundamente defectuosas que necesitan un replanteamiento drástico? ¿Podrían las percepciones de las personas que más han sufrido por esas políticas fallidas orientar a los académicos hacia nuevas soluciones?

 

 

La Fundación William and Flora Hewlett invirtió 7.5 millones de dólares para apoyar los primeros cinco años del proyecto de Hanson y Rodrik, “Reimaginando la Economía”, con sede en el centro Malcolm Wiener de Política Social de la Escuela Kennedy de Gobierno de Harvard. Rodrik y Hanson analizarán en profundidad a los grupos de personas y los lugares que dejó atrás la globalización, y tratarán de trazar nuevos caminos hacia el crecimiento productivo y el empleo decente.

 

La Fundación Hewlett está financiando otros tres proyectos en la Universidad de Howard, el MIT y la Universidad Johns Hopkins. Omidyar Network está financiando un proyecto similar en el Instituto Santa Fe.  La Fundación Ford y la Fundación Open Society financiarán proyectos adicionales en todo el mundo diseñados para repensar la política económica.

 

La Fundación Hewlett ha expresado que vivimos “en un momento en que las prescripciones económicas ortodoxas están fallando y la gobernabilidad democrática está amenazada en todo el mundo”. Por eso proponen que los académicos de las principales instituciones investiguen cómo deberían funcionar las economías en el siglo XXI y los objetivos a los que deberían servir para las sociedades de todo el mundo.

 

Hanson y Rodrik impulsarán un proyecto donde se trabajará con profesionales y trabajadores sobre el terreno, así como con teóricos académicos, para idear enfoques alternativos viables a lo que a menudo se denomina como el “Consenso de Washington” o la “hiperglobalización”. El objetivo final es ir más allá del análisis de cómo funciona (o no funciona) la economía para considerar nuevas estructuras, mecanismos de gobernanza y formas de economía de mercado y capitalismo.

 

Las políticas existentes han dejado a muchas sociedades con marcadas desigualdades de oportunidades. Se requieren soluciones políticas prácticas que puedan generar crecimiento y empleos productivos en los lugares donde la gente más los necesita.

 

Las fallas de las políticas convencionales han llevado al estancamiento económico en muchos países en desarrollo. El desafío en todas partes ahora no es sólo lograr el crecimiento, sino la equidad. La gente exige que gobiernos y sector privado se pongan a trabajar para crear buenos empleos, bien remunerados y oportunidades productivas.

 

Si fracasamos en el intento, avanzaremos más en el insostenible patrón de desigualdad. Durante años hemos excluido sectores de la población que no se han beneficiado de la apertura, la innovación y la globalización. De ahí el avance del populismo. La gente exige respuestas a estos problemas.

 

El nuevo proyecto de investigación de Hanson y Rodrik construirá una base de datos de políticas locales y regionales y sus efectos, comenzando en los Estados Unidos pero luego expandiéndose a otros países. El énfasis en las opciones de políticas basadas en el lugar, en las localidades, es diferente a la mayoría de los enfoques convencionales, que se basan en estrategias económicas nacionales.

 

Las tácticas locales que se utilizarán han incluido ofrecer capacitación específica para trabajadores, en función de las necesidades de los empleadores locales; ayudando a convertir fábricas y almacenes abandonados a nuevos usos; y brindar apoyo logístico a las empresas locales capaces de expandirse y crear nuevos puestos de trabajo.

 

Hanson dice que el proyecto requiere un poco de humildad, dado el escaso éxito de las políticas de empleo en las comunidades que se encuentran en dificultades, en los últimos años. “Dani Rodrik y yo vamos a aprender de la comunidad de profesionales sobre cómo han tratado de mejorar las condiciones económicas sobre el terreno, y luego trataremos de extraer lecciones más generales sobre los éxitos y fracasos que han experimentado”.

 

Es un enfoque verdaderamente innovador. Hanson dice que este trabajo académico que iniciarán debería producir “la primera base de datos armonizada y sistemática de políticas e intervenciones basadas en el lugar, en las localidades, a nivel nacional, durante los últimos 40 años. Y, luego, ese análisis nos ayudará a brindar alguna orientación sobre qué combinaciones de políticas parecen estar mejor adaptadas a qué conjuntos de condiciones en una comunidad”.

 

“Algunas de esas opciones de políticas públicas se burlarán de la sabiduría convencional. Y el menú resultante de acciones de creación de empleo, capacitación, beneficios por desempleo y políticas educativas debería ayudar a los funcionarios locales y estatales a responder a circunstancias muy locales”, dice Hanson. 

 

Seguramente habrá lecciones que podrán aprender los gobernadores y presidentes municipales de nuestro país. El trabajo también se basará en modelos europeos e internacionales que enfatizan enfoques basados ​​en el lugar, en la localidad, en lugar de confiar en soluciones tales como incentivos fiscales para atraer nuevas empresas, que han tenido poco éxito.

 

Por un lado, el profesor Gordon Hanson se centrará principalmente en las comunidades estadounidenses en apuros, que han sufrido la peor parte del impacto de China. El profesor Dani Rodrik aportará su perspectiva global para evaluar el panorama laboral estadounidense y también analizará cómo las políticas locales en otros países industriales y en desarrollo han tratado de enfrentar los efectos del comercio global en los trabajadores.

 

El objetivo de los dos investigadores es que este proyecto se vuelva más internacional a medida que avancen. Si bien es cierto que las políticas públicas deben adaptarse a los contextos locales, los desafíos son verdaderamente de naturaleza global. Los encontramos en todos los países.

 

Por lo pronto, participemos en el seminario del CCE el lunes 28 de febrero y el martes 1 de marzo. Seguramente podremos escuchar ahí nuevos planteamientos en beneficio de las familias mexicanas.

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/vision-de-futuro-mexico-2042/

Friday, February 18, 2022

La presidencia nunca deja al presidente

 

 

La presidencia nunca deja al presidente


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

Todos hablan del Presidente. Creo que tiene el trabajo más difícil de México. Después de verlo en las conferencias de prensa mañaneras y de leer las columnas y las redes sociales, he llegado a la conclusión de que, tal vez el problema no es él, sino su oficina. Está desvencijada. AMLO está en rebelión contra su oficina. Y eso no es bueno para un presidente.

 

La polarización es imparable. El tejido nacional está desgarrado. Y no se ve que alguien quiera tomar la aguja y el hilo, mucho menos la máquina de coser. De hecho, parece que no hay un costurero de la unidad.

 

En estos tiempos de crisis, todos esperamos que el presidente de México deje la ideología a un lado y se convierta en el presidente negociador. Pero AMLO no negocia.

 

Todos esperamos que la oposición construya una nueva narrativa sobre el México del futuro, a donde queremos llegar. Pero tenemos una oposición calcificada.

 

Todos critican a AMLO porque, en sus pleitos, no parece presidencial. Yo creo que no hay hombre, ni mujer, que pueda representar la diversidad de 130 millones de mexicanos.

 

En estos días hemos sido testigos de la intensidad de los sentimientos públicos en torno al presidente. Sus rupturas con la tradición presidencial han sido discordantes. Creo que si AMLO fuera una figura menos divisiva, podríamos ver las cosas de manera diferente.

 

Podríamos considerar que lo que parece impertinencia podría ser evidencia de que la administración del cargo mismo está en dificultades por falta de un modelo de toma de decisiones.

 

Somos una nación obsesionada con los presidentes y el presidencialismo, tanto que socavamos la idea misma de nuestra democracia constitucional. La presidencia moderna se ha salido de control. Tal vez debemos reconocer que ningún hombre, o mujer, por sí solo(a) pueda realizar las funciones cada vez más amplias de un cargo tan complejo, lleno de exigencias. El presidente está atrapado en una operación de respuesta a las crisis.

 

La oficina del presidente no sólo ha acumulado poder; ha crecido en alcance, complejidad, y en grado de dificultad. Raro es el día en que los asesinatos, ajustes de cuentas y las acciones de las organizaciones criminales no presenten un peligro inminente que requiera la atención del presidente. La carga emocional de estas responsabilidades es casi insondable. 

 

El presidente debe estar preparado para, en un día, consolar a la viuda de un policía asesinado por el narco, recibir en Palacio Nacional a un atleta o a un CEO de una empresa global, establecer una agenda legislativa para un congreso irresponsable. Al mismo tiempo, el presidente debe soportar el escrutinio implacable de la era digital. 

 

La paradoja es que muchos creen que el presidente es el hombre más poderoso de México y, sin embargo, es incapaz de lograr muchos de sus objetivos, frustrado por el congreso, los tribunales o la enorme burocracia que a veces sólo controla nominalmente y está repleta de activistas convertidos en funcionarios.

 

Con los eventos de las últimas dos semanas, nos hemos dado cuenta de que AMLO está reconfigurando la presidencia. Está desmantelando la maquinaria. Puede que le corresponda a su sucesor(a) volver a armarla. No ha visto que lo importante rara vez es urgente, y lo urgente rara vez es importante.

 

Creo que hay una realidad: hasta que AMLO arregle su oficina y defina un modelo eficaz de toma de decisiones, seguirá frustrado. Y muchos mexicanos seguirán decepcionados. El presidente necesita ayuda. Su oficina está sobrecargada, las demandas son implacables. No puede ser un gobierno de un solo hombre.

 

Los mexicanos todavía necesitan que su presidente tenga éxito. Nuestra democracia está obsesionada con la presidencia. Es cierto que algunas decisiones sólo las puede tomar el presidente. Pero eso no significa que el presidente sea responsable o culpable de todo.

 

A veces es fácil jugar para la multitud. Pero, en la presidencia, ya no se trata de cortejar a los votantes sino cumplir con el más alto interés de la nación. Las elecciones alientan a los candidatos a hacer cualquier cosa que mantenga a la multitud en un rugido. Pero a medida que la oposición cuestione más el desempeño, las habilidades del presidente requieren ser apoyadas por un equipo eficaz y por un modelo de toma de decisiones eficiente. El sistema de toma de decisiones presidenciales tiene que ser metódico, porque las decisiones presidenciales son excepcionalmente difíciles. 

 

El sistema actual está tan centrado en una campaña permanente en torno a la revocación, que se prefiere la persuasión, más que los resultados. Parecería que el cortejo presidencial activo y continuo de la opinión popular, la acción acalorada, es más importante que la fría deliberación. 

 

Cuando hay una línea borrosa entre hacer campaña y gobernar los presidentes tratan de comunicar una sensación de cambio de página, un nuevo capítulo en la historia del país, una nueva oportunidad. Ya nada es como antes. Los adversarios no pudieron, no quisieron y no lo hicieron. Pero “nosotros” sí lo haremos. Lo que no se dan cuenta es que el éxito anterior no predice el éxito futuro. Las acciones hablan más que las palabras. Debido a que la retórica es el instrumento de campaña, los presidentes caen en la trampa de pensar que pueden hablar sobre cualquier problema. 

 

Los presidentes que llegaron por la fuerza de su retórica y espectacularidad, siguen confiando en esas habilidades. Concluyen que pueden convencer a la gente de cualquier cosa. Sin embargo, gobernar es algo más que hablar. Para dirigir un gobierno, se necesitan capacidades diferentes a las necesarias para ganar el derecho a dirigir ese gobierno. Las campañas requieren ataques y comparación. Gobernar requiere deliberación, cooperación y negociación. Un buen equipo es crucial para tomar buenas decisiones. 

 

Los presidentes modernos entienden que, a veces, la oportunidad de obtener una victoria rápida tiene que posponerse para lograr una victoria posterior más grande. La paradoja es que el presidente es el más fuerte y el más débil de todos los líderes nacionales a la vez. Y debe estar dispuesto a soportar esa paradoja. El dilema para los presidentes modernos es trabajar con sus opositores para lograr algo. 

 

La mayor amenaza que enfrenta México es la falta de unidad política. La polarización, la brecha partidista es cada vez más amplia y más dañina. Y los políticos pronto se darán cuenta que los votantes no quieren excusas; quieren acción. 

 

Creo que para reparar la presidencia moderna, los políticos, los ciudadanos y los medios de comunicación debemos cambiar nuestras expectativas y centrarnos en lo que es realista. El presidente no es un superhéroe y tampoco es un villano. Él es humano, falible, capaz de mucho. Entonces, ¿qué queremos que haga y cómo podemos ayudarlo a hacerlo?

 

Debe tener tiempo para pensar, rodearse de gran talento gerencial y efectividad de gobierno. La presidencia requiere temperamento, habilidades emocionales y está sujeta a una alta tensión psicológica. La presidencia no forja el carácter, sólo lo revela.

 

Los presidentes deben encontrar una forma segura de desahogarse. Un presidente tiene que designar a alguien para que le diga la verdad y luego creerle cuando le da noticias desagradables. Sin embargo, la franqueza será difícil de alcanzar en Palacio Nacional, donde el instinto de todos es halagar al jefe.

 

El sistema de análisis de opciones para la toma de decisiones presidencial tiene que ser lo más sólido posible. La imprevisibilidad no puede ser un estilo de gestión. El presidente exitoso se concentra, sin descanso, en unos pocos objetivos bien elegidos. Para que funcione bien, la presidencia tiene que tener orden y estructura. Palacio Nacional no debe dominar todo. Para eso está el gabinete. 

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/la-presidencia-nunca-deja-al-presidente/