Thursday, December 31, 2020

¿Es Nuevo León un estado exitoso?


¿Es Nuevo León un estado exitoso?

 

Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

 

Hasta hace poco, en casi en todo nuestro país -y en muchas partes del mundo- se asociaba a Nuevo León con factores positivos que le daban una buena imagen. Por lo general, las principales ciudades del mundo se identifican con un atributo en especial, y durante mucho tiempo la idea de Nuevo León estuvo ligada a su carácter emprendedor e industrial.

 

La capacidad de su gente para sobreponerse a las duras condiciones geográficas y salir adelante generó una percepción positiva de Nuevo León. Ser la cuna donde nacieron algunas de las empresas mexicanas más reconocidas, muchas de las cuales han alcanzado una importante dimensión internacional, también fue clave para proyectar una imagen “exitosa” y "ganadora".

 

La calidad de las universidades, públicas y privadas, hizo que Nuevo León fuera un estado  atractivo. Jóvenes de otras partes de la república, o de América Latina, venían a estudiar aquí su carrera. Muchos se quedaban a trabajar y a formar una familia por las oportunidades que encontraban. Igualmente, muchas compañías de otros países decidían ubicarse en Nuevo León por la calidad profesional de la gente que podían emplear.

 

Nuevo León es también un centro reconocido del deporte, el montañismo y sede de los mejores equipos profesionales de fútbol, béisbol y básquetbol de nuestro país. A pesar de que estos atributos siguen siendo muy valiosos para la imagen de nuestro estado, hay que reconocer que varios factores negativos le están restando valor a la "marca Nuevo León".

 

Existe un desorden vial y urbano. El transporte público es deficiente. Basta ver el desastre del mantenimiento de las principales avenidas en el área metropolitana de Monterrey y la cantidad desordenada de anuncios espectaculares. La construcción de edificios y fraccionamientos ha sobrepasado todos los límites. La contaminación del medio ambiente ha llegado a niveles nunca antes vistos. Los que vivimos aquí ya nos acostumbramos al triste y sucio panorama urbano. Pero si pensamos en los empresarios extranjeros que nos visitan por primera vez, será muy difícil cambiar la primera impresión negativa que se llevan.

 

Por supuesto, lo que más ha afectado la imagen de Nuevo León es el Covid-19 y la inseguridad. Al igual que otros estados del país, enfrentamos un reto muy grave, para el que no hay soluciones fáciles. Pero, a diferencia de otros sitios, lo que está pasando aquí no es algo nuevo; ya lo habíamos sufrido y lo habíamos solucionado. Quizá por eso llama más la atención. En septiembre pasado, el Gobierno de Estados Unidos amplió la advertencia para que sus ciudadanos tomen precauciones o reconsideren sus viajes a Nuevo León ante la violencia que impera en nuestro estado https://bit.ly/34YSZaW . 

 

Esta situación puede cambiar si se toman las decisiones correctas. Es cuestión de liderazgo. Ya sabemos prácticamente quiénes son los cuatro candidatos que van a competir por la gubernatura el próximo año. Más que angustiarse por su imagen y su presencia en las redes sociales, estos políticos deberían dedicar estos días a analizar los aspectos fundamentales para que Nuevo León pueda tener éxito. 

 

Por las lecturas que he hecho de diferentes publicaciones sobre el futuro de las ciudades, creo que habría que concentrarse en tres aspectos: 1) la capacidad de integrarse a la economía global; 2) la necesidad de contar con gobiernos y administraciones públicas eficientes a nivel estatal y municipal; y 3) la disposición para que el estado se reinvente y se convierta en el mejor lugar para vivir.

 

Hoy en día, las ciudades de todo el mundo están compitiendo más que nunca para atraer inversiones, turistas y toda clase de recursos. Esto exige contar con infraestructura adecuada, condiciones competitivas en materia de costos e impuestos y profesionistas con las habilidades necesarias para trabajar en compañías internacionales.

 

Implica que necesitamos invertir más en educación y promover más alianzas entre las universidades, los negocios y los gobiernos. Es increíble, pero en las pruebas de desempeño de los egresados de la educación básica, Nuevo León ya no está en los primeros lugares del país, sino a media tabla https://bit.ly/3aYh31w . Eso no se puede tolerar. 

 

La competencia de hoy es por el talento. Nuevo León tiene que convertirse en un estado con la más alta calidad educativa, en un centro de innovación, investigación y desarrollo a la altura de los mejores del mundo. De otra forma, tendremos muy poco que ofrecer a la economía global.

 

En lo que toca a la necesidad de formar gobiernos de calidad, aquí hay todavía mucho que hacer. Nuevo León tiene que reinventarse a sí mismo. Existen muchos ejemplos exitosos a nivel mundial. Dublín en Irlanda, Sydney en Australia, Calgary en Canadá y muchas más han demostrado que sí se puede. Nuevo León ya había dado pasos importantes en este sentido. Para lograr que sea un “estado del conocimiento”, un “estado del emprendedor” y “el mejor lugar para vivir”, toda la sociedad tiene que hacer un gran esfuerzo.

 

Durante mucho tiempo tuvimos la suerte de contar con una valiosa "marca Nuevo León". Desafortunadamente, en los últimos años la hemos erosionado en forma por demás irresponsable. La “marca Nuevo León” no le pertenece ni a una empresa, ni a un partido, ni a un candidato, ni al Gobierno del Estado. Es de todos. 

 

Ante las fuerzas de la globalización, sería inaceptable que nos quedemos con los brazos cruzados o festejemos la frivolidad de algunas campañas políticas. Necesitamos una “marca Nuevo León” que nos distinga por nuestro propio carácter, y por una historia de éxito de la que todos podamos sentirnos orgullosos.

 

Nuestra misión es clara: lograr que se diseñen y ejecuten políticas públicas de excelencia y elegir el mejor liderazgo político responsable para que la gente de Nuevo León viva en una sociedad más segura, más libre, más justa y más próspera.

 

https://www.sdpnoticias.com/columnas/javier-trevino-es-nuevo-leon-un-estado-exitoso.html

Wednesday, December 30, 2020

La tarea de AMLO antes de la Cumbre de las Américas


La tarea de AMLO antes de la Cumbre de las Américas

 

Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

Los primeros 100 días del gobierno de Joseph Biden serán clave para marcar el futuro de su gobierno. Entre las prioridades, a partir del 20 de enero de 2021, estarán: lograr que el Senado confirme el mayor número de integrantes de su gabinete; vencer la pandemia del coronavirus; reactivar la economía; empujar las reformas para combatir el cambio climático; modificar la política migratoria, de asilo y ciudadanía; detener la construcción de la barda en la frontera con México, lo que ahorrará millones de dólares al Departamento de Defensa.

 

Una prioridad más de los primeros 100 días será iniciar los trabajos para organizar la Novena Cumbre de las Américas. Originalmente algunos habían pensado que se llevaría a cabo en el mes de abril en Florida, de manera presencial. Pero el Covid-19 ha obligado a replantear fechas y tal vez se lleve a cabo de manera virtual, un poco más adelante. Todavía no hay una fecha definitiva, pero será en 2021. 

 

La Cumbre de las Américas se lleva a cabo cada tres años y es la única reunión de todos los líderes de los países de América del Norte, América Central, América del Sur y el Caribe. La primera reunión fue en Miami, en diciembre de 1994, y el anfitrión fue el Presidente Bill Clinton. Lo recuerdo muy bien porque yo tenía apenas unos días de haber sido nombrado Subsecretario de Relaciones Exteriores y apoyé al Canciller Ángel Gurría en todos los preparativos. Durante la transición habíamos trabajado en la elaboración de materiales y en la agenda para la participación del Presidente Ernesto Zedillo en esta histórica primera Cumbre.

 

La Cumbre es uno de los mejores instrumentos para promover la cooperación en el continente americano, desde la competitividad económica, hasta el desarrollo social, pasando por los temas de finanzas, energía, tecnología, comunicaciones, seguridad regional, combate al narcotráfico, promoción de la democracia y los derechos humanos.

 

Después de Miami, los líderes del continente se reunieron en Santa Cruz, Bolivia (1996, cumbre extraordinaria), luego en Santiago, Chile (1998), Quebec, Canada (2001), Monterrey, Mexico (2004, cumbre extraordinaria), Mar del Plata, Argentina (2005), Puerto España, Trinidad and Tobago (2009), Cartagena, Colombia (2012), Ciudad de Panamá (2015), Lima, Peru (2018). 

 

Cabe recordar que cuando se llevó a cabo la Cumbre Extraordinaria de las Américas en Monterrey, en 2004, no asiste Cuba. Pero todavía estaba fresco el recuerdo de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Financiamiento al Desarrollo de 2002, en esa misma ciudad. Y nadie olvidaba, con pena, el incidente -anecdótico ahora- del “comes y te vas” entre Vicente Fox y Fidel Castro.

 

Si hay alguien preparado para encabezar una cumbre latinoamericana es Joe Biden. Como Vicepresidente durante ocho años, fue el principal emisario del gobierno de Obama en América Latina y el Caribe. Hizo 16 viajes a la región.

 

Ahora bien, antes de llegar a la Cumbre de las Américas, el gobierno de México debe consolidar la estrategia de su relación bilateral con Estados Unidos y la construcción de una nueva visión para América del Norte.  El Presidente López Obrador no puede llegar al encuentro presencial o virtual entre los Presidentes sin haber hecho esta tarea. Tenemos poco tiempo.

 

América del Norte es una región unida por la geografía, pero históricamente dividida por el idioma y la cultura. Esto empezó a cambiar el 15 de abril de 1988, cuando George Bush padre dirigió un mensaje a la Sociedad Americana de Editores de Periódicos. El entonces candidato del Partido Republicano a la Presidencia de Estados Unidos propuso crear una zona de libre comercio entre Canadá, Estados Unidos y México.

 

Era una idea difícil de vender. Con un comercio bilateral de apenas 52 mil millones de dólares, México era el cuarto socio comercial de Estados Unidos, después de Canadá, la Comunidad Europea y Japón. El mismo Bush comentaba que lograr este objetivo podía llevar años, pero que seguramente se convertiría en un motor de crecimiento económico.

 

Dos años más tarde, el 26 de marzo de 1990, recibí una llamada de Peter Truell, corresponsal de asuntos de comercio internacional del periódico The Wall Street Journal. Mi función como Ministro de Información y Vocero de la Embajada de México en Washington me convertía en un punto de referencia obligado para los medios estadounidenses interesados en México. Peter fue al grano: "tengo información confiable, de altos funcionarios estadounidenses, sobre una serie de reuniones que sostuvieron a fines de febrero Jaime Serra y José Córdoba con James Baker, Brent Scowcroft, Carla Hills, Robert Mosbacher y Michael Boskin, en donde acordaron negociar un acuerdo de libre comercio entre México y Estados Unidos".

 

Era cierto. Durante meses se había trabajado de manera discreta para iniciar la negociación de un Tratado de Libre Comercio. No había duda de que la filtración provenía de una fuente estadounidense. Lo que no quedaba claro era la intención: ¿se trataba de acelerar el proceso, o de aniquilarlo antes de que pudiera despegar?

 

Al día siguiente, el Wall Street Journal publicó un artículo que marcaría el inicio de una nueva etapa en la cobertura periodística sobre México en los medios de Estados Unidos: "U.S. and Mexico Agree to Seek Free Trade Pact -Bush Aides Confirm Talks; Result Would Be Market For All of North America" (Estados Unidos y México acuerdan buscar un pacto de libre comercio -Colaboradores de Bush confirman conversaciones. El resultado sería un mercado para toda América del Norte).

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Con este artículo se daba el banderazo de salida a un nuevo tipo de escrutinio. Al margen de la negociación comercial, los medios, los actores políticos, los académicos y los ciudadanos de Estados Unidos querían conocer mejor a este socio potencial, que hasta ese momento sólo era un vecino distante al sur del "Río Grande". No era concebible negociar con alguien a quien no sólo desconocían, sino que, además, no entendían. De ahí la tarea de editores y productores de medios electrónicos para llenar un profundo vacío informativo.

 

Artículos, editoriales, reportajes y perfiles se publicaron en las páginas de los principales diarios y revistas estadounidenses durante los tres años que duró la negociación del TLCAN. Programas de radio y televisión intentaron mostrar a los estadounidenses algunos aspectos de la vida de los mexicanos. Parecía que los temas de corrupción, narcotráfico y pobreza dejarían su lugar a los temas económicos y comerciales.

 

El gobierno de México fortaleció su presencia en Washington, aprendió a cabildear y a acercarse a los miembros del Congreso de Estados Unidos. Funcionarios mexicanos se reunieron con los consejos editoriales de los periódicos regionales y locales; sostuvieron entrevistas en radio y televisión; y hablaron ante todo tipo de asociaciones, llevando el mensaje de los beneficios que un TLCAN generaría en Estados Unidos y en México. Se establecieron alianzas entre los sectores empresariales para generar un ambiente favorable a la negociación comercial. Había una idea clara y un objetivo concreto, y todo el esfuerzo nacional se orientó a lograrlo.

 

Como anticipaba Bush padre, negociar, firmar y poner en marcha el TLCAN fue toda una proeza. También tuvo razón al prever el impulso económico que representaría: hoy, el comercio bilateral sobrepasa los 600 mil millones de dólares. Pero el comercio no lo es todo en esta compleja relación bilateral. Todavía nos falta un largo camino para conocernos mejor y avanzar en la integración plena de América del Norte.

 

En estos últimos dos años hemos visto que los gobiernos avanzan muy lentamente en la tarea de construir un nuevo entendimiento bilateral. Sin embargo, las sociedades de ambos países van más allá de las visiones burocráticas de Washington y la Ciudad de México: escriben sobre el otro, estudian al otro, trabajan con el otro y promueven una creciente integración por regiones.

 

En 1958, Edmundo O'Gorman publicó "La invención de América". El descubrimiento del "cuarto continente" representó un proceso de cambio científico, ideológico y político. O'Gorman señalaba, con razón, que "América fue la instancia que hizo posible, en el seno de la Cultura de Occidente, la extensión de la imagen del mundo a toda la tierra y la del concepto de historia universal a toda la humanidad".

 

En el inicio de la tercera década del siglo 21, parecería que son los ciudadanos, los centros de estudio, los medios de comunicación y las empresas los que demuestran que son ellos quienes están inventando, día a día, una nueva región llamada América del Norte.  Ojalá que se sumen pronto los gobiernos. AMLO tiene una tarea que cumplir antes de la Cumbre de las Américas. Y debe darse prisa.

 

https://www.sdpnoticias.com/columnas/javier-trevino-la-tarea-de-amlo-antes-de-la-cumbre-de-las-americas.html

Tuesday, December 29, 2020

La otra vacuna


La otra vacuna

Javier Treviño

@javier_trevino

¿Regresará la vida a la normalidad anterior a la pandemia del coronavirus? Leemos en este sitio diariamente toda la información y todas las opiniones sobre las vacunas contra el Covid-19. Ahora tenemos que lograr que se distribuyan y apliquen amplia, eficiente y equitativamente. El reto logístico es inmenso. La política debe quedarse a un lado porque no podemos dividir todavía más al país entre los estados, o entre los grupos sociales, que tienen acceso a la vacuna y los que no. Son grandes las expectativas y pueden ser grandes también las frustraciones. ¿Cuánto podrá durarnos la inmunidad después de la vacuna? ¿Deberemos seguir con el cubrebocas, la sana distancia y las pruebas?

Pero eso no es todo. Ahí no terminan los riesgos para la población. Un mayor uso de la tecnología significará que las habilidades que se demandan en todos los empleos cambiarán en los próximos cinco años. Necesitaremos pronto “otra vacuna” para combatir el desempleo. Además de la inversión privada, necesitaremos la vacuna de la educación y la capacitación. ¿Tendremos la capacidad de generarla y aplicarla?

Según el Informe sobre el Futuro de los Empleos del Foro Económico Mundial, tendremos que enfrentar un reto enorme. La mitad de los trabajadores y empleados necesitaremos volver a capacitarnos en los próximos cinco años, a medida que nos llegue el doble impacto de la pandemia y la recesión junto con la creciente automatización de las empresas. Es la conclusión a la que llega la tercera edición de este informe.

No todo son malas noticias. La tecnología misma que está transformando el ambiente de empleo también nos puede ayudar a aprender nuevas habilidades. Tenemos las herramientas a nuestra disposición. La innovación tecnológica puede aprovecharse al máximo. 

El Foro Económico Mundial estima que, para 2025, 85 millones de puestos de trabajo podrían ser desplazados por un cambio en la división del trabajo entre los humanos y las máquinas. Pero pueden surgir 97 millones de nuevos empleos que se adapten mejor a la nueva división del trabajo entre humanos, máquinas y algoritmos.

Ante la automatización, la lista de habilidades que los empleadores demandarán en los próximos cinco años son:


1.     Pensamiento analítico e innovación.

2.     Aprendizaje activo y estrategias de aprendizaje.

3.     Habilidad para solucionar problemas complejos.

4.     Pensamiento crítico y análisis.

5.     Creatividad, originalidad e iniciativa.

6.     Liderazgo e influencia social.

7.     Uso, monitoreo y control de la tecnología.

8.     Diseño y programación de tecnología.

9.     Resiliencia, tolerancia al estrés y flexibilidad.

10.  Razonamiento, solución de problemas, generación de ideas.


Además de estudios de opinión, cuantitativos y cualitativos, el Foro Económico Mundial siguió los tipos de conocimientos especializados a través de plataformas como LinkedIn y Coursera. El 94% de los líderes empresariales que entrevistó esperan ahora que los empleados adquieran nuevas habilidades en el trabajo. Es un aumento considerable si consideramos que en 2018 eran sólo el 65%.

Los encuestados estiman que alrededor del 40% de los trabajadores requerirán una recalificación de seis meses o menos, pero esa cifra es mayor para los que trabajan en la industria del consumo y en la industria de la salud. En los sectores de los servicios financieros y la energía, esa proporción de trabajadores que pueden recibir una nueva formación en un plazo de seis meses es menor porque necesitarán programas más intensivos.

¿Cómo se logrará la formación y capacitación? De tres maneras: internamente en las empresas, a través de plataformas de aprendizaje en línea y con el apoyo de consultores externos. La pandemia ya aceleró la tendencia a la reconversión en línea. Las plataformas de aprendizaje reciben un mayor número de personas. El tiempo para aprender las nuevas habilidades depende de la sofisticación de los contenidos. Puede variar de uno a cuatro meses. Pero las personas también necesitarán financiamiento.

Ahora bien, además de todos estos estudios muy serios deberíamos hacernos la pregunta fundamental: ¿Tenemos la estabilidad mental y la inteligencia emocional para reinventarnos repetidamente? Esas son las dos únicas destrezas que necesitaremos para el resto de nuestras vidas, según lo expresó Yuval Noah Harari en una entrevista en Impact Theory con Tom Bilyeu https://bit.ly/2M3WFl9 .

 

El historiador y filósofo israelí, autor de Sapiens: De animales a dioses; de Homo Deus: Breve historia del mañana; y de 21 lecciones para el siglo XXI, ha dicho que la revolución tecnológica no será un evento, sino una serie constante de eventos. “Enfrentaremos una cadena de revoluciones. Y esas dos habilidades marcarán la diferencia entre sobrevivir y perecer ante los cambios en el trabajo”.

 

“Si se piensa en la rigurosa educación formal del siglo XX, con sus distintos niveles académicos de gran costo y exigencia, estas dos destrezas, que ni siquiera se enseñan, parecen poca cosa. Sin embargo, insistió Harari, marcarán la diferencia entre los que se adaptan y los que sucumben al escenario de variabilidad constante que presenta el siglo XXI”.

 

Lo que realmente vamos a enfrentar es una sucesión de revoluciones en el mercado laboral. Sí habrá cambios de aquí a 2025, pero serán mayores diez años después, y mucho más dramáticos en los siguientes diez años.

 

Según Harari, nadie sabe cómo será el trabajo en 2040. Ya no existe, como a comienzos del siglo XX, una opción segura de profesión. Se sabrá sobre la marcha. Mientras tanto, la mejor inversión no es en una carrera determinada, sino “en inteligencia emocional y en equilibrio mental, y en esta clase de habilidades sobre cómo continuar cambiando, como seguir aprendiendo.

 

¿Y eso cómo se adquiere? En principio, no se estudia. Harari nos dice: “No tenemos una universidad de flexibilidad mental. Hay que tener presente que mucho de lo que hoy aprendemos podría dejar de ser relevante en 20 o 30 años, así que, sea lo que sea aquello que uno haga, también tendría que invertir en el desarrollo de la inteligencia emocional, el equilibrio mental y la capacidad de mantenerse cambiando y aprendiendo y reinventándose a lo largo de la vida”. “Si en el pasado la educación se parecía a construir una casa de materiales sólidos, como la piedra, y con cimientos profundos, ahora se parece más a construir una carpa que se pueda doblar y llevar a otro lugar con rapidez y sencillez”, añadió el historiador.

 

Harari destacó que otra gran consecuencia de la aceleración tecnológica es que el ser humano se ha convertido en “un animal hackeable”. Es algo que ningún sistema totalitario del siglo XX logró. Hoy, en cambio, existe la tecnología que permite descifrar a los humanos como sistema, saber qué pensamos para anticipar nuestras elecciones, para manipular nuestro deseos humanos de maneras que nunca antes fueron posibles.

 

“Conócete a ti mismo, porque el algoritmo ya te conoce bien” sentencia Harari. A diferencia de la mente humana, que “es una máquina que produce relatos constantemente” —y sobre todo un relato muy importante, que es la identidad—, la tecnología recoge datos del sistema humano. Eso hace que, más temprano que tarde, los algoritmos puedan conocer a una persona mucho más de lo que ella se conoce a sí misma, algo que tampoco había sucedido nunca antes en la historia, subrayó.

 

Finalmente, y volviendo a las vacunas, Harari concluye: “Una de las grandes batallas del siglo XXI se va a librar entre la privacidad y la salud. Y creo que la salud va a ganar. La mayoría de la gente va a estar dispuesta a renunciar a una importante cantidad de privacidad a cambio de un mejor cuidado de la salud”.

 

En México, ante el protagonismo político de quienes deberían cuidar nuestra salud, necesitamos asegurar un sistema que nos garantice gran cuidado de la salud pero sin poner en peligro nuestra privacidad, nuestra democracia y nuestras libertades.

 

https://www.sdpnoticias.com/columnas/javier-trevino-la-otra-vacuna-coronavirus-economia.html

Monday, December 28, 2020

AMLO tendrá tres adversarios en 2021


 

AMLO tendrá tres adversarios en 2021


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

El 2021 será un año difícil. Necesitamos abatir la pandemia, atraer más inversiones, crear mejores empleos y lograr que la economía vuelva a crecer. La elección será un plebiscito sobre el desempeño del gobierno.

 

Los adversarios del Presidente no son los partidos que formaron la alianza para competir en los distritos electorales. Los verdaderos adversarios del Presidente serán tres: los silos, los celos y los círculos íntimos dentro de su gobierno. Todavía tiene tiempo para solucionar estos males que destruyen valor público.

 

Silos

 

Los silos son los grandes contenedores de forma cilíndrica que se utilizan en la agricultura para almacenar el grano. Están totalmente sellados y separados entre sí, por lo que no hay ningún tipo de contacto entre ellos. Pues los primeros dos años ilustran que el gobierno de la 4T ha sido atacado por una siloitis aguda. Para que un gobierno avance, todos sus miembros deben trabajar de forma conjunta, colaborativa, con una buena relación y coordinación entre ellos. De lo contrario, aparece la “mentalidad de silo” que es uno de los mayores problemas que existen en las organizaciones. La siloitis es la incapacidad para trabajar eficientemente entre las unidades del gobierno.

 

Las áreas del gobierno de la 4T están formadas por servidores públicos agrupados en silos, debido a que hay un mínimo contacto entre ellos y no intuyen qué sucede más allá de sus tareas. La austeridad, el activismo y la incompetencia los alcanzó. Los problemas públicos no se resuelven ni en los bajos ni en los niveles medios. Se espera la solución desde lo alto del silo, es decir, desde el jefe, junto con una falta de confianza en los demás y una disminución de la productividad del conjunto. 

 

Parecería que los silos son el ADN del gobierno. Es evidente que destruyen valor público. Los silos hacen que los servidores públicos ignoren la colaboración. Restringen su visión a su propia isla de poder. Un gobierno de silos es lento.

 

Una buena administración exige que la gente colabore y trabaje en el logro de objetivos comunes. Lo que es importante es construir puentes entre los silos para mejorar la comunicación entre las diferentes secretarías.  

 

¿Qué necesita la 4T? Crear una visión unificada. Los silos son devastadores. Se desperdician recursos, la productividad se aniquila. Los silos son característicos de una excesiva y desequilibrada visión vertical de la organización. Hay “gobiernos” dentro del gobierno. Hay secretarías y dependencias que les falta motivación, ganas de trabajar, colaborar y comunicarse con otras. Hay barreras que provocan que los colaboradores de la 4T, que se supone que están en el mismo equipo, trabajen unos contra otros.

 

Celos

 

Después de los silos vienen los celos. No son otra cosa que una actitud despreciable que destruye valor público. El celoso en el gobierno intenta menospreciar el mérito, los esfuerzos ajenos, a fuerza de resentimiento. Genera improductividad porque no reconoce que la meritocracia contribuye eficazmente al desarrollo. 

 

Los celos son un arma de los mediocres, que no están acostumbrados a mejorar sus propias cualidades. Los mediocres no son tontos. Lejos de ello, son muy hábiles para ascender, solamente ponen en práctica la confabulación en contra de los otros. Buscan desprestigiar a los talentosos cuestionando sus acciones y logros. Combaten la competencia y las buenas aptitudes.

 

Los celosos en el gobierno son incapaces de reconocer los propios errores, esconden su responsabilidad, jamás reconocen el esfuerzo ajeno. Temen ser reemplazados por otro mejor. Evitan aprender. No aceptan que otros puedan aportar. La competencia personal es una ofensa. El mérito de otro es una agresión. Definen al enemigo como “aquél que quiere el puesto que tú tienes o aquél que tiene el puesto que tú quieres”.

 

Los celosos son obsesivos. La lucha política se reduce a cálculos y maniobras para eliminar al adversario. Son intolerantes. No admiten la posibilidad de establecer vínculos de confianza y compromisos mutuos. No contribuyen, para nada, al logro de metas y objetivos. 

 

El celoso considera que lo que él pierde otro lo ganará. Se fastidia porque otro cuente con una situación mejor. Tiene un complejo de inferioridad que afecta la autoestima y un alto grado de inseguridad. El resentimiento juega un papel decisivo. Es difícil que forme un equipo. No reconoce que cuanto mayores sean los talentos que se reúnan, mejores serán los resultados para todos. Siente que corre el riesgo de que los más destacados les hagan sombra.

 

En general, los celosos y los envidiosos se oponen a la innovación por temor a perder posiciones. En ningún caso reconocen su fragilidad. El celo y la envida son uno de los motivos por los que hay quienes recomiendan seriamente la pobreza como meta de sus recetas sociales. Arthur Schopenhauer escribe que la envidia "es el alma de la unión de todos los mediocres".

 

Círculos íntimos

 

Por último, ante los procesos electorales y la segunda mitad de la administración, toda la vida del gobierno girará en torno a la formación de círculos íntimos. Moderados y radicales se agruparán.

 

En uno de sus ensayos más memorables, “The Inner Ring” (El círculo íntimo), C. S. Lewis (1898-1963), Profesor de Literatura Medieval y del Renacimiento en la Universidad de Cambridge, retoma una de sus conferencias magistrales ante los alumnos de la Universidad de Londres en 1944.

 

Describe la experiencia y el deseo de todos los seres humanos quienes, en diversas etapas de la vida, buscan sin cesar ser aceptados dentro del “círculo íntimo” de cualquier grupo que les importe en ese momento. Para muchos, la vida es una lucha continua por entrar a círculos íntimos, uno tras otro.

 

Percibirse excluido del “círculo íntimo”, o fuera de él, es un sentimiento insoportable para algunos. Y el deseo de estar dentro puede hacer que muchos digan cosas que de otra manera no dirían, o que no digan lo que deberían decir. Este deseo de estar dentro del círculo íntimo al que se aspira puede afectar trabajo, afiliaciones políticas, relaciones en la comunidad.

 

C. S. Lewis dice: “creo que, en la vida de todos los hombres en ciertos períodos, y en la vida de muchos hombres en todos los períodos entre la infancia y la vejez extrema, uno de los elementos más dominantes es el deseo de estar dentro del círculo íntimo y el terror de quedarse fuera de él. En la escuela, puede desear estar en el gobierno estudiantil, en un equipo deportivo, en un club o, simplemente, ser aceptado por los chicos “geniales”. En la universidad tal vez el deseo de ser parte de una fraternidad. En el trabajo, quizás el deseo sea ser socio en un despacho de abogados, obtener una promoción o ser parte del equipo ejecutivo de una empresa”.

 

El problema no radica en ese proceso natural de la vida. Entrar y salir de círculos íntimos no tendría nada de malo. Sin embargo, como dice Lewis: el deseo y la perversidad que nos lleva a penetrar los círculos íntimos puede ser peligroso. “A menos que usted tome medidas para evitarlo, este deseo será uno de los motivos principales de su vida, desde el momento en que ingresa a su profesión hasta que es demasiado viejo para preocuparse de ello”.

 

Todo esto es una llamada de atención para los políticos de la 4T. El político, en su carrera ascendente, siempre va a tener opciones que se le presentarán en cruces de caminos. Puede avanzar por el camino de la virtud o por el camino del vicio. Pero si su única guía es la ambición de penetrar círculos íntimos, ser un personaje reconocido, llegar a puestos más altos, entonces seguramente seguirá por el camino que le permita ser admitido, aunque no sea ético, sea cual fuere la consecuencia. Eso le generará una gran satisfacción.

 

El político que tiene el alma grande no debe desear ingresar a los círculos íntimos. Mejor debe hacer un trabajo excepcional y su capacidad lo pondrá en el centro del círculo que realmente importa. El trabajo, el servicio a la gente, la creación de valor público debería ser el fin de los políticos de la 4T. Quienes se han mantenido durante años en el círculo íntimo del presidente AMLO (Octavio Romero, Julio Scherer, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Jesús Ramírez), así como los recién llegados por la pandemia (Hugo López-Gatell, Jorge Alcocer Varela) tienen la palabra.

 

https://www.sdpnoticias.com/columnas/javier-trevino-amlo-tendra-tres-adversarios-en-2021-celos-circulo-intimo.html

Saturday, December 26, 2020

UE y Reino Unido dan tarea navideña a Tatiana

 

UE y Reino Unido dan tarea navideña a Tatiana


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

 

El Reino Unido y México firmaron, el 15 de diciembre pasado, un acuerdo que reproduce, a partir del 1 de enero, las condiciones comerciales que manteníamos antes del Brexit. Acordaron mantener las preferencias arancelarias con las que ambos países se han beneficiado en el marco del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM), en vigor desde el 1° de julio del año 2000.

 

Este “Acuerdo de Continuidad” permite mantener certeza y reglas claras en el intercambio comercial. El Reino Unido es un jugador importante en el comercio internacional. En 2019, se ubicó como el quinto importador mundial, con 689,603 millones de dólares, y como el décimo exportador, con 469,168 millones de dólares, de acuerdo con la Organización Mundial de Comercio (OMC).

 

Este acuerdo respalda una relación comercial entre México y el Reino Unido de más de 5,000 millones de libras (6,600 millones de dólares) y asegura el acceso recíproco a los mercados. El acuerdo beneficiará a sectores de relevancia para México, como el automotriz. A esto se agrega el Acuerdo de Promoción y Protección Recíproca de las Inversiones, mismo que permanecerá sin cambios con el fin de seguir impulsando los flujos de capital bilaterales.

 

En 2021 se espera que la Secretaría de Economía trabaje en un nuevo y ambicioso acuerdo comercial que permitirá a nuestros dos países ir mucho más allá en áreas como los datos, el comercio digital, la inversión, la propiedad intelectual y los servicios. Así que Tatiana Clouthier tiene tarea. Deberá estudiar y entender rápidamente lo que se negoció entre el Reino Unido y la Unión Europea, y apenas se anunció ayer.

 

Fue una Navidad feliz para el Reino Unido (desde luego, sólo en términos económicos, esto es, al margen de la tragedia global del coronavirus, que tanto ha afectado a esa sociedad). La libra esterlina despegó con el optimismo generado por el anuncio del acuerdo comercial entre el Reino Unido y la Unión Europea. Había un riesgo inherente sobre la moneda británica porque la incapacidad de llegar a un acuerdo hubiera sido catastrófica para la economía de ese país. Se logró evitar el peor de los escenarios. Ahora todos tendrán que entender los detalles del acuerdo. Sin duda el acuerdo es benéfico para los inversionistas.

 

Brexit ha sido un trauma para la Unión Europea. Nadie cree que haya sido bueno. Pero con el acuerdo anunciado la víspera de Navidad, se logró mitigar algo del daño. Valió la pena la unidad y la firmeza europea para lograr un buen acuerdo comercial con el Reino Unido, después de cuatro años de intensas negociaciones. El Reino Unido seguirá siendo un socio y aliado de la Unión Europea. Desde el punto de vista de ambas partes, los conceptos de soberanía, fortaleza y unidad son la clave para mirar al futuro. La preocupación se centró en la protección de los ciudadanos europeos, los pescadores y los productores. Se garantizaron los intereses y derechos de los negocios y ciudadanos europeos. Ahora lo que seguiría, probablemente, es un acuerdo de defensa y seguridad, y otro de intercambio educativo y cultural.

 

El acuerdo contará con todo el apoyo politico interno en el Reino Unido por razones de interés nacional. El líder del Partido Laborista, Sir Keir Starmer, dijo que el acuerdo no era lo que les prometió el gobierno. “No protege adecuadamente la industria manufacturera ni los servicios financieros, ni las industrias creativas ni los derechos de los trabajadores. Además lo dejaron para el último minuto. Eso tendrá un costo para los negocios para prepararse”. 

 

Pero los laboristas lo apoyarán en el Parlamento porque son una oposición seria y responsable y porque está en el interés nacional. No podrían abstenerse. La verdad es que Sir Keir se está preparando para un eventual gobierno laborista en 2024. Va a heredar este acuerdo, así que lo tienen que hacer funcionar. Aunque fue muy claro sobre la responsabilidad del acuerdo: “las consecuencias recaen exclusivamente en la puerta del número 10 de Downing Street”, la sede del gobierno.

 

El acuerdo es histórico; ahí se define un nuevo capítulo en la relación. Los gobiernos tienen que examinar ahora el texto negociado por la Unión Europea. Tienen que ratificarlo rápidamente para que entre en vigor el 1 de enero de 2021. Como en todas partes, ante la pandemia, el acuerdo es una fuente de certidumbre para los negocios porque permite planear en un entorno de mayor estabilidad y seguridad. Sin duda, el acuerdo permitirá una mayor cooperación.

 

El equipo negociador de Ursula von der Leyen y Michel Barnier, de la Unión Europea, hicieron un buen trabajo. Ahora se requiere una rápida aprobación del Consejo de Europa y la ratificación del Parlamento Europeo. No debemos olvidar que la Unión Europea está formada por 27 estados miembros y cualquiera de ellos podría vetar el acuerdo de 2 mil páginas, así que lo tendrán que entender rápidamente, en unos cuantos días, antes de que termine el año. 

 

Este acuerdo genera certeza para los negocios porque logra eliminar aranceles y cuotas para el comercio entre la Unión Europea y el Reino Unido y cubre un comercio total de 660 mil millones de libras. Sólo como ejemplo de la relevancia, baste recordar que cuatro quintas partes de los alimentos importados en el Reino Unido provienen de la Unión Europea.

 

Los derechos pesqueros de la Unión Europea en aguas británicas, con valor de 650 millones de libras al año era el último de los obstáculos para el acuerdo. Pero lograron solucionarlo. Además, se revisará el cumplimiento del acuerdo en cuatro años.

 

Boris Johnson, el Primer Ministro del Reino Unidos reiteró: “Hemos recuperado el control de nuestras leyes y nuestro destino. Desde el 1 de enero estaremos fuera de la unión aduanera y fuera del mercado único. Las leyes británicas serán elaboradas únicamente por el Parlamento británico, interpretadas por los jueces británicos en las cortes británicas y eso pondrá fin a la jurisdicción de la corte de justicia de la Unión Europea”. 

 

Pero también les dijo a los líderes europeos que “el Reino Unido seguirá siendo su amigo, su aliado, su seguidor y su mercado número uno. El país permanecerá apegado a Europa cultural, emocional, histórica, estratégica y geológicamente. Es fantástico que hayamos ganado libertad, ahora lo importante es cómo usarla, cómo aprovecharla”.

 

Los negociadores europeos dijeron que el acuerdo es justo y equilibrado. La cooperación entre la Unión Europea y el Reino Unido seguirá en áreas de interés mutuo como el cambio climático, energía, seguridad y transporte.

 

https://www.sdpnoticias.com/columnas/javier-trevino-ue-y-reino-unido-dan-tarea-navidena-a-tatiana-brexit.html

 

Thursday, December 24, 2020

Las razones del enfrentamiento en Estados Unidos


 Las razones del enfrentamiento en Estados Unidos 


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 


El martes pasado estaba viendo el partido de fútbol entre Tigres UANL y Los Angeles FC. Era la gran final de la Concachampions. Por supuesto, Tigres ganó 2 a 1 y se coronó como campeón. Al mismo tiempo revisaba en mi iPad la página de Real Clear Politics, en donde todavía hay muchos artículos que argumentan el triunfo de Trump y el robo de la elección por parte de Biden y los demócratas. Y la verdad es que no podía entenderlo, ¿si Biden ganó más votos, por qué no se acepta el resultado de las elecciones tal como Los Angeles FC tuvo que aceptar que no le pudo ganar a Tigres?

 

Todo me quedó más claro hasta que ayer leí una columna publicada en The Washington Times, el periódico conservador de la capital de Estados Unidos. El texto es de Newt Gingrich, el famoso ex Presidente de la Cámara de Representantes (1995-1999) y ex precandidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos en 2012. 

 

Gingrich es brillante y explica claramente por qué no aceptará a Joe Biden como presidente de Estados Unidos. Y su visión es compartida por millones de estadounidenses que se niegan a aceptar los resultados de la elección, simplemente porque su nivel de indignación llegó a un límite que nunca se había experimentado en Estados Unidos.

 

Voy a tratar de resumir los argumentos de Gingrich:

 

1.     He pasado cuatro años observando a la izquierda cómo se resiste a Trump y a su enfoque. Lo han cuestionado desde la elección de 2016. Mi coraje y mi temor no provienen solamente de lo que ocurrió con los votos. Mi negativa a relajarme y aceptar el resultado de la elección crece y crece por el nivel de indignación que es algo que nunca había experimentado en mi carrera de 60 años en la política de Estados Unidos.

 

2.     El reto para mi, y para otros conservadores, no es que estemos en desacuerdo con la izquierda dentro de un mundo que habitamos conjuntamente. En realidad, vivimos en dos mundos alternativos y separados. El mundo de la izquierda es el mundo establecido por las fuerzas que han sido las dominantes en Estados Unidos durante la mayor parte de mi vida.

 

3.     Mi mundo es el de la rebelión populista que cree que estamos siendo destruidos, que se están cancelando nuestras libertades y que nuestras religiones están bajo asalto. Mi mundo es el que se asombra por la nueva campaña de derechos humanos que descertifica cualquier escuela religiosa que no acepte los valores sexuales seculares. Mi mundo es el que se indigna cuando muchos gobernadores demócratas mantienen abiertos los casinos al mismo tiempo que cierran las iglesias durante la pandemia. Mi mundo es el que cree que las políticas demócratas ante el covid-19 han enriquecido a los más ricos mientras que han afectado a los dueños de los pequeños negocios de la clase media.

 

Este es el contexto que nos plantea Gingrich y que es compartido por millones de seguidores de Trump. Ahora les presento un resumen de los agravios que nos ayudan a entender por qué no van a parar la resistencia y por qué no van a cooperar con Biden:

 

1.     En 2016 apoyé a un candidato externo que cuestionó el viejo orden. Cuando mi candidato ganó, se le acusó de una supuesta relación con los rusos. Ahora sabemos, cuatro años después, que el equipo de Hillary Clinton fue el que financió la mentira total.

 

2.     Miembros del FBI se involucraron en actos criminales para ayudarlos. Primero, al no perseguir ni inculpar a quienes habían borrado 33 mil correos electrónicos y exigieron a un subordinado que usara un martillo para destruir físicamente los discos duros. La segunda vez mintieron a los jueces de FISA para destruir al general Michael Flynn y espiar al candidato Trump y a su equipo.

 

3.     Los medios liberales nacionales ayudaron e instigaron cada paso. Todo esto fue un intento de dañar al nuevo presidente y lograr que se nombrara un “consejero especial” que al final del día no produjo nada.

 

4.     Nosotros recordamos que los demócratas empezaron a hablar de juicio político a Trump aún antes de que tomara posesión. Incluso el periódico The Washington Post publicó una nota, el mismo día de la toma de posesión, sobre los movimientos de los demócratas para avanzar en el juicio político. 

 

5.     70 legisladores demócratas boycotearon la toma de posesión de 2016. También se organizó una manifestación masiva de la izquierda, en Washington, el día siguiente, en donde Madonna anunció que ella soñaba con hacer explotar a la Casa Blanca, arrancando el gran aplauso de la gente.

 

Gingrich escribe algo totalmente claro en su columna: “Estas fuerzas que me piden ahora que coopere con el nuevo presidente deben saber que estoy adoptando el mismo modelo de Nancy Pelosi de resistencia constante. Nada de lo que he visto de Biden desde la elección me ofrece una esperanza de que hará algo por los más de 74 millones de estadounidenses que votaron por Trump”.

 

Lo que ahora me queda claro es que Gingrich y los millones de conservadores no reaccionan ante el resultado numérico o a los votos, sino ante el ambiente previo, durante y posterior a la elección.

 

Cuestionan cómo Twitter y Facebook censuraron al cuarto periódico más grande y más antiguo de Estados Unidos, el New York Post (fundado por Alexander Hamilton), porque reportó las noticias que podrían dañar las posibilidades de Biden. Y se preguntan dónde estaban el New York Times y el Washington Post?

 

Sacan de inmediato a relucir las dudas sobre la verdad de la historia de Hunter Biden y dicen que es ahora imposible esconder o evitar. Y nos recuerdan que la familia del candidato demócrata a presidente recibió al menos 5 millones de dólares de una entidad controlada por China, el más grande adversario de Estados Unidos.

 

Gingrich dice que eso fue una evidente recompensa y la mayoría de los estadounidenses que votaron por Biden nunca lo escucharon, o les dijeron antes de la elección que era desinformación rusa. Gingrich afirma que, de acuerdo con una encuesta del Media Research Center, una vez que lo escucharon, 17% dijo que hubieran cambiado su voto. “Eso hubiera significado otro resultado de la elección. La censura funcionó exactamente como la tenían planeada”.

 

La ira de los conservadores es evidente. Gingrich dice: “Típicamente, los periódicos y los demás medios se agrupan y se unen cuando la libertad de prensa es amenazada por la censura. ¿Donde está la frase mojigata de que la democracia se muere en la oscuridad? Trágicamente, el Washington Post es ahora parte de la oscuridad”.

 

Gingrich dice que teme por su país cuando: 

 

1.     Twitter censura cuatro o cinco de los tweets de Rush Limbaugh en un día.

 

2.     Los gigantes monolíticos del internet censuran al Presidente de los Estados Unidos.

 

3.     Veo que billonarios de la élite como Mark Zuckerberg pueden gastar 400 millones de dólares para contratar gobiernos de ciudades para maximizar la participación electoral en distritos específicamente demócratas, sin ninguna consideración a lo que dicen las leyes electorales sobre gasto o sobre los estándares del buen gobierno.

 

4.     Leí que Apple tiene una regla muy firme de nunca irritar a China y veo cómo la NBA se inclina ante Beijing.

 

5.     Veo historia tras historia sobre el fraude en la elección que no se publica, sin la menor curiosidad ni práctica periodística.

 

Hay una crisis de confianza en Estados Unidos. Para los conservadores hubo fraude total y algunos ultrajes más específicos. Eso era suficiente para cambiar el sentido de toda la elección.

 

Gingrich argumenta que los funcionarios en cada estado en disputa (swing states) quebrantó sus propias leyes al enviar millones de boletas o de solicitudes de boletas a cada votante registrado. Esto estuvo documentado en la demanda de Texas, que fue desechada por la Suprema Corte, basada en temas procedimentales y no en los méritos del caso. 

 

Gingrich añade que es claro que virtualmente todos los estados en disputa suspendieron esencialmente los requisitos normales para verificar los votos en ausencia. Los promedios de rechazo fueron de un orden de magnitud menor que en un año normal.

 

Gingrich dice que todos los medios de la élite liberal mintieron sobre las expectativas de la vacuna contra el covid-19. Culparon al Presidente Trump por la pandemia global aun y cuando él hizo todo lo que le instruyeron los mejores científicos. En múltiples debates los moderadores totalmente establecieron que estaba mintiendo sobre la posibilidad de que Estados Unidos tuviera una vacuna antes de que terminara el año. “Si los estadounidenses hubieran sabido que la pandemia estaba en su etapa final, eso habría hecho una diferencia en la elección” remata Gingrich.

 

Otro reclamo de Gingrich: La comisión de los debates unánimemente suspendió el segundo debate en un momento crítico para hacerle daño a Trump. Si hubiera habido un debate más como el final, sin duda hubiera sido esencial.

 

Según el político conservador, tan solo una de las cosas que mencionó en su artículo hubiera sido suficiente para que los seguidores de Trump pensaran que fueron robados por el despiadado establishment demócrata. Y sentencia: “Ese establishment se hará más corrupto y agresivo si se sale con la suya con estos actos evidentes”.

 

El reclamo de los conservadores no podría ser más contundente: “Por más de cuatro años, todo el establishment se movilizó contra el presidente Trump, como si fueran un sistema inmune tratando de matar a un virus. Ahora nos están diciendo que nosotros estamos socavando la democracia”.

 

Al final del proceso, hay 74 millones de votantes que apoyaron al Presidente Trump a pesar de todo. Son decenas de millones de estadounidenses que están profundamente perturbados y enojados.

 

La conclusión de Newt Gingrich es muy clara:

 

“Si Biden gobierna desde la izquierda, y seguramente será forzado a hacerlo así, ese número crecerá rápidamente y nosotros ganaremos de manera masiva la elección de 2022”.

 

Hay un enfrentamiento serio y amargo en Estados Unidos. Debemos tomar nota de ello.

 

https://www.sdpnoticias.com/columnas/javier-trevino-las-razones-del-enfrentamiento-en-estados-unidos.html