Saturday, May 11, 2024

Llegó la hora de los “game-changers”

 

 

Llegó la hora de los “game-changers”


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

Las elecciones del 2 de junio cambiarán las reglas del juego político de México. Posiblemente, el nuevo gobierno federal alterará significativamente el status quo y generará un cambio en la forma en que opere o aborde los desafíos políticos. Habrá una reconfiguración del sistema de partidos. Se construirá un nuevo modelo de equilibrio político rumbo al 2030.

 

Serán los gobernadores y presidentes municipales quienes tendrán el potencial de impulsar cambios positivos, fomentar la innovación, mejorar la eficacia y la capacidad de respuesta de los gobiernos para abordar los complejos desafíos del siglo XXI. Ellos serán, como dicen en inglés, los “game changers”. 

 

En un entorno de "cambio de juego", será la política local en donde se tenga la enorme posibilidad de innovar. Pero esto no ocurrirá de la noche a la mañana; ni las soluciones caerán del cielo. Las características de una persona que cambia las reglas del juego en el gobierno son:

 

1.     Soluciones innovadoras: introducen ideas, tecnologías o enfoques novedosos para abordar problemas de larga data o aprovechar oportunidades emergentes. Desafían el pensamiento convencional y traspasan las barreras de lo que es posible, dentro de las limitaciones de la burocracia gubernamental.

 

2.     Resultados impactantes: producen resultados tangibles y significativos que tienen un impacto positivo significativo en la sociedad. Ya sea mejorando los servicios públicos, reduciendo la desigualdad o promoviendo la sostenibilidad ambiental, logran resultados que los ciudadanos sienten.

 

3.     Escalabilidad y replicabilidad: no se limitan a “proyectos piloto” aislados o iniciativas a pequeña escala. Sus ideas y sus obras tienen el potencial de ampliarse y replicarse. Ofrecen soluciones que se adaptan a diversos entornos y pueden implementarse a una escala más amplia para maximizar su impacto.

 

4.     Colaboración intersectorial: procuran la colaboración entre agencias gubernamentales, socios del sector privado y organizaciones de la sociedad civil. Aprovechan la experiencia, los recursos y las redes de múltiples actores para impulsar la innovación y lograr objetivos compartidos.

 

5.     Toma de decisiones con datos: se basan en datos y evidencia, utilizando investigaciones y análisis empíricos para informar el diseño, la implementación y la evaluación de las políticas públicas. Priorizan la transparencia y la rendición de cuentas, utilizando datos para seguir el avance, medir los resultados y tomar decisiones informadas.

 

6.     Respuesta a las necesidades de los ciudadanos: comprenden las preferencias de los ciudadanos. Priorizan el diseño centrado en el usuario y los mecanismos de retroalimentación para garantizar que las políticas y los servicios respondan a las necesidades de las personas a las que sirven.

 

7.     Enfoque adaptativo e iterativo: adoptan la experimentación y la iteración, reconociendo que la innovación a menudo requiere la voluntad de asumir riesgos, aprender de los fracasos y adaptar estrategias basadas en la retroalimentación y las circunstancias cambiantes.

 

8.     Voluntad política y liderazgo: con voluntad política y liderazgo superan la inercia burocrática, la resistencia al cambio y los intereses creados que pueden oponerse a los esfuerzos de reforma. Los líderes políticos desempeñan un papel crucial a la hora de defender iniciativas innovadoras y movilizar el apoyo de las partes interesadas.

 

9.     Visión a largo plazo: se guían por una visión para el futuro, centrándose en un desarrollo sostenible e inclusivo que beneficie a las generaciones de hoy y de mañana. Trascienden los ciclos políticos de corto plazo y priorizan inversiones que generen dividendos sociales, económicos y ambientales duraderos.

 

10.  Compromiso y participación pública: involucran a los ciudadanos como participantes activos en el proceso de gobernanza, fomentando un sentido de propiedad, empoderamiento y responsabilidad. Crean oportunidades de diálogo, colaboración y co-creación para garantizar que las políticas y decisiones reflejen las diversas perspectivas e intereses de la población.

 

Además de todas las características y cualidades anteriores, la herramienta estratégica de gobernadores y presidentes municipales exitosos será la transparencia.

 

En una era de sobrecarga de información y escrutinio público, la transparencia se convertirá en la piedra angular de una gobernanza eficaz. Ya no es simplemente un principio de buenas prácticas; es una herramienta estratégica que las organizaciones gubernamentales pueden aprovechar para lograr beneficios significativos. Al adoptar la transparencia, los gobiernos pueden cultivar la confianza pública, fortalecer la rendición de cuentas y, en última instancia, mejorar su legitimidad y eficacia.

 

Es más probable que los ciudadanos crean en su gobierno y lo apoyen cuando tienen acceso a información sobre sus operaciones, procesos de toma de decisiones y asignación de recursos. Este acceso abierto fomenta un sentido de responsabilidad, permitiendo al público monitorear el desempeño del gobierno y responsabilizarlo por sus acciones.

 

La transparencia también fortalece la rendición de cuentas interna dentro de las organizaciones gubernamentales. Cuando los procesos son abiertos y las decisiones se toman de manera transparente, resulta más fácil identificar áreas de mejora, prevenir la corrupción y garantizar que los recursos se utilicen de manera eficiente y efectiva. Esto conduce a un gobierno más receptivo y eficiente, que en última instancia sirve a los mejores intereses de sus ciudadanos.

 

Además, la transparencia puede ser una herramienta poderosa para mejorar el compromiso y la participación públicos. Al proporcionar a los ciudadanos información fácilmente disponible, los gobiernos pueden alentarlos a participar activamente en el proceso de toma de decisiones. Este enfoque colaborativo puede conducir a políticas más informadas y representativas, lo que en última instancia conducirá a mejores resultados para la comunidad.

 

Sin embargo, implementar la transparencia requiere un enfoque estratégico y un equipo de excelencia. Los gobiernos deben trabajar activamente para que la información sea accesible y comprensible para el público. Esto implica utilizar varios canales, como sitios web fáciles de usar, iniciativas de datos abiertos y estrategias de comunicación claras. Además, es fundamental fomentar una cultura de apertura dentro de la organización, alentando a los funcionarios a aceptar el intercambio de información y el escrutinio público.

 

No todos los políticos se podrán convertir en “game-changers”. Sólo los líderes con mentalidad para transformar una nación pueden serlo. Se requiere valor, trabajar en contra de la corriente, voluntad para integrar equipos, redes, y una visión sin límites para dibujar el futuro. 

 

La mentalidad del “game-changer” en una época de transformación obligará a analizar el papel de la tecnología y las preferencias de los ciudadanos. En los próximos seis años habrá más cambios en el mundo de los que se han producido en los últimos 100. Para ser exitoso en el nuevo entorno se requiere colaborar, entender y usar la inteligencia artificial y estar conectado.

 

Los líderes políticos más innovadores serán los que se atrevan a dibujar un nuevo entorno, a cambiar reglas, a eliminar límites e incluso a desechar estándares que todavía funcionan. Tendrán que ser disruptivos, experimentar con propósito y escalar proyectos; pensar y dirigr con la mirada puesta en la siguiente generación.

 

Gobernadores y presidentes municipales que cambian las reglas del juego tienen que despertar el interés del ciudadano. Deben ser audaces, visionarios, ir más allá de lo convencional, buscar un propósito, beneficiar siempre a la gente; tener un impacto en la vida de las personas. 

 

Persistencia, confianza y valentía deben formar parte de la identidad de esos nuevos líderes políticos. Todo es cuestión de mentalidad. No pueden seguir estirando los viejos modelos que dieron éxito en el pasado y que hicieron grandes a los políticos de antes. En tiempos de transformación, no se logra el éxito sin disrupción, sin innovación, sin espíritu emprendedor.

 

Esperamos que nuestros líderes en los estados y municipios sean optimistas, disruptivos, que experimenten, que corran riesgos, que fracasen, que aprendan de sus errores y que triunfen. La inteligencia emocional es relevante. No basta el conocimiento técnico. A la realidad se le descubre, se le interpreta, se le da forma, y se encuentran las oportunidades.

 

Tienen que conocer la historia, aprender de sus competidores políticos, tener ideas propias, conocer a los ciudadanos, analizar datos, contar con un flujo continuo de información, diseñar estrategias de autoajuste, romper las reglas, tener creatividad, alejarse de los convencionalismos.

 

El gobierno es una constante tarea de descubrimiento y solución de dilemas. Siempre se presentarán paradojas y contradicciones. Aquí es cuando la transparencia deja de ser simplemente un imperativo moral y se convierte en una herramienta estratégica que las organizaciones gubernamentales pueden aprovechar para lograr beneficios significativos. 

 

Al fomentar la confianza, fortalecer la rendición de cuentas y mejorar la participación pública, la transparencia allana el camino para un gobierno más eficaz y legítimo, que servirá a los mejores intereses de los ciudadanos.

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/llego-la-hora-de-los-game-changers/

 

Saturday, May 04, 2024

Las políticas públicas sí importan

 

 

Las políticas públicas sí importan


Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

¿Por qué debería interesarnos la manera en que se van a formular y a implementar las políticas públicas con el nuevo gobierno federal que iniciará el 1 de octubre?

 

Por la sencilla razón que, en cualquier país, las políticas públicas son muy poderosas. Tienen un papel crucial en la vida cotidiana. Las buenas políticas públicas pueden mejorar nuestra vida, mientras que las malas políticas públicas provocan sufrimiento para todos.

 

La formulación e implementación de políticas públicas es un proceso complejo que involucra numerosos actores, consideraciones y objetivos. Las políticas públicas eficaces desempeñan un papel crucial a la hora de fortalecer a las sociedades, abordar los desafíos y promover el bienestar de los ciudadanos. Sin embargo, no todas las políticas son iguales. 

 

Para garantizar que estén bien diseñadas, implementadas de manera eficiente y produzcan resultados positivos, las buenas políticas públicas deberían tener las siguientes características y cualidades:

 

1.     Datos y evidencia.

 

Una de las cualidades fundamentales de una buena formulación de políticas públicas es el uso de la evidencia y los datos. Las políticas deben basarse en la investigación, el análisis y la evaluación de información relevante. Los tomadores de decisiones deben buscar aportes de expertos, realizar evaluaciones exhaustivas de los impactos potenciales y basar sus decisiones en evidencia empírica en lugar de ideología o sesgos personales. La toma de decisiones basada en evidencia mejora la eficacia y credibilidad de las políticas, asegurando que estén diseñadas para abordar problemas reales y lograr resultados eficaces.

 

2.     Inclusividad y transparencia.

 

La buena formulación de políticas públicas es inclusiva y transparente, involucra diversas perspectivas y a todos los actores interesados durante todo el proceso. La inclusión garantiza que se tengan en cuenta las necesidades, preocupaciones e intereses de todas las partes afectadas, promoviendo la justicia y la legitimidad. La transparencia asegura la apertura y la rendición de cuentas, lo que permite a los ciudadanos comprender la lógica detrás de las decisiones políticas, realizar un seguimiento del proceso de implementación y responsabilizar a los servidores públicos por sus acciones. Al fomentar la inclusión y la transparencia, la formulación de políticas públicas genera confianza, fomenta la colaboración y mejora la legitimidad de las acciones gubernamentales.

 

3.     Flexibilidad y adaptabilidad.

 

La naturaleza dinámica de las sociedades y la complejidad de los desafíos exigen que las políticas públicas sean flexibles y adaptables. La formulación de políticas eficaces reconoce la necesidad de ajustar las estrategias en respuesta a circunstancias cambiantes, tendencias emergentes y nueva información. Los servidores públicos deberían diseñar políticas con mecanismos incorporados para su revisión, evaluación y ajuste a lo largo del tiempo. La flexibilidad permite que las políticas sigan siendo pertinentes y receptivas a las necesidades cambiantes, garantizando su eficacia y sostenibilidad a largo plazo.

 

4.     Coherencia e integración.

 

La buena formulación de políticas públicas busca lograr coherencia e integración entre diferentes ámbitos y niveles de gobernanza. Las políticas deben estar alineadas con fines y prioridades generales, evitando objetivos contradictorios o conflictivos. La integración implica coordinar esfuerzos entre varios sectores, departamentos y niveles de gobierno para abordar desafíos complejos de manera integral. Las políticas coherentes e integradas maximizan las sinergias, minimizan la duplicación y mejoran la eficacia general de las intervenciones gubernamentales.

 

5.     Equidad y justicia social:

 

Una característica esencial de una buena formulación de políticas públicas es su compromiso con la equidad y la justicia social. Las políticas deben reducir las desigualdades, promover la inclusión y garantizar que los beneficios y las cargas se distribuyan de manera justa en toda la sociedad. Las consideraciones de equidad deben incorporarse a lo largo de todo el proceso político, desde el diseño y la implementación hasta la evaluación y el seguimiento. Al priorizar la equidad y la justicia social, la formulación de políticas públicas contribuye a construir sociedades más justas e inclusivas, donde todos tengan la oportunidad de prosperar.

 

6.     Largo plazo y responsabilidad:

 

La formulación eficaz de políticas públicas requiere una perspectiva de largo plazo, considerando las implicaciones de las decisiones para las generaciones futuras y la sostenibilidad. Las políticas no sólo deben abordar los desafíos inmediatos sino también anticipar y mitigar posibles riesgos e incertidumbres futuros. La orientación a largo plazo implica invertir en medidas preventivas, desarrollar resiliencia y promover el desarrollo sostenible. Al priorizar los objetivos a largo plazo sobre los beneficios a corto plazo, la formulación de políticas públicas contribuye al bienestar y la prosperidad de las generaciones presentes y futuras.

 

No es fácil formular ni implementar buenas políticas públicas. Pero los ciudadanos debemos ser exigentes y mantener viva la esperanza. ¿Qué quisiéramos ver en el equipo de gobierno de la próxima presidenta de México?

 

1.     Que tengan formación académica de excelencia y la experiencia necesaria para gobernar. La tarea del gobierno no es para aficionados.

 

2.     Que los servidores públicos de alto nivel escuchen con generosidad.

 

3.     Que se caractericen por su humildad, que admitan las limitaciones de sus conocimientos. 

 

4.     Que sean constructivos y críticos, que hagan preguntas y busquen la verdad.

 

5.     Que sean sinceros, que acepten que sus políticas no van a resolver todos los problemas de México.

 

6.     Que siempre analicen las ventajas y desventajas de las opciones y seleccionen la mejor.

 

7.     Que no vean a la política y a la opinión pública como molestias sino como factores clave que, si no se valoran bien, conducen a decisiones desafortunadas.

 

8.     Que identifiquen enfoques en los que la capacidad del gobierno y la aceptabilidad de una política se unen con un resultado beneficioso, aunque no sea el ideal.

 

La gente no estará siempre de acuerdo con las decisiones del gobierno. Habrá desacuerdos sobre qué hacer, en cada comunidad, en cada organización. Esos desacuerdos deben ser gestionados, tratados, reconocidos y resueltos cuando sea posible. 

 

Justamente para eso es la democracia y la experiencia de los servidores públicos que deben encontrar una manera de avanzar colectivamente. Los valores y la educación de los servidores públicos son fundamentales en esta tarea. Las decisiones políticas dependen de esos valores y de esa educación. 

 

Elegiremos una nueva presidenta y esperamos que su equipo de gobierno entienda también nuestros valores, y nos representen puntualmente al tomar decisiones políticas. El compromiso con la diversidad, la inclusión y la pertenencia es crucial en la búsqueda de la excelencia en el gobierno. 

 

Hace muchos años estudié la maestría en Harvard. Ahí aprendí que las buenas políticas públicas siempre cumplen tres criterios: son técnicamente apropiadas, son administrativamente viables y son políticamente sostenibles. Deben ser implementadas por gobiernos reales en el mundo real, donde hay muchas limitaciones. Tienen que satisfacer una necesidad sentida por individuos de carne y hueso, que no son expertos, pero que son más sabios que los burócratas y saben encontrarle sentido a las cosas.

 

El nuevo equipo de gobierno debe pensar en que las políticas públicas son para que todos los mexicanos podamos vivir como integrantes de una sociedad más segura, libre, justa y sosteniblemente próspera. 

 

Creo que una buena ejecución de las políticas públicas puede ayudar a fortalecer la confianza de la gente en la democracia y el futuro de México. Los ciudadanos quieren estar convencidos de que el gobierno hará un buen trabajo en las cosas que importan.

 

Podría parecer contraintuitivo, pero la única manera de acabar con la polarización y restaurar la fe en la gobernanza es con una ejecución de excelencia de las políticas públicas. La ejecución impecable es lo que podría restaurar la confianza en el gobierno. 

 

La gente necesita creer que su gobierno sirve y está ahí para servirles. La gente necesita estar convencida de que las organizaciones de la sociedad civil y las del sector privado también sirven a la gente.

 

Lo cierto es que el próximo gobierno requiere mujeres y hombres talentosos, capacitados, experimentados, que decidan dedicar todo su tiempo a trabajar con honestidad y eficacia por la gente. 

 

Los administradores públicos son estrategas y técnicos a la vez. Definen el valor público y también la manera en que operan sus oficinas. Anticipan un mundo de conflictos políticos y tecnologías cambiantes que les obligará a rediseñar sus organizaciones. No habrá una armonía estable en el país ni en el mundo que les permita la simple continuidad.

 

El servicio público es una de las más elevadas vocaciones. Es fundamental involucrar en el gobierno a las mejores mentes, a los ciudadanos más reflexivos, más innovadores y a los más capacitados, porque las políticas públicas sí importan.

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/las-politicas-publicas-si-importan/