¿Habrá espacio para las nuevas ideas?

 

 

¿Habrá espacio para las nuevas ideas?

Javier Treviño

 

@javier_trevino

 

Ayer leí una columna muy interesante en el periódico El Economista. Antonio Ocaranza (@aocaranza), director general de OCA Reputación, habla del desinterés de AMLO en los temas empresariales.

 

El mensaje central de la columna es: la recuperación económica de México sería más acelerada si el presidente apoyara a las empresas con la misma pasión que muestra en otros temas. Hay cuatro factores que explican por qué no puede hacerlo: (1) su limitado conocimiento de la economía, (2) su desconfianza en el empresariado, (3) la carencia de una política industrial, y (4) su dependencia del TMEC. Vale la pena leer el artículo completo en https://bit.ly/3yDOtvi .

 

Ocaranza concluye su columna con un mensaje muy fuerte que me dejó pensando: “Más allá de lo económico, las empresas enfrentan el reto de corregir la forma en que el presidente ha definido su rol social. Necesitan continuar dirigiendo acciones para que la sociedad reconozca sus valiosas aportaciones a la generación de empleo, prosperidad de las familias y desarrollo de México. Para convencer al gobierno, quizá haya que esperar a uno nuevo”.

 

Cierto. “Ya no es como antes”. “Primero los pobres”. “Acabar con la corrupción”. Son las tres premisas fundamentales. No hay espacio para las nuevas ideas. 

 

Pero, tal vez, 30 puntos podrían ayudar a la reflexión en los confines más íntimos de la 4T:

 

1.     El año 2020 fue muy difícil. Los desafíos fueron monumentales. Ningún país se salvó del ataque del COVID-19 o de las crisis autoinflingidas: económica, educativa y de seguridad.

 

2.     El cambio climático está mostrando atrocidades: desastres naturales, incendios, huracanes y sequías. 

 

3.     La inestabilidad política afectó a los estados frágiles. La democracia ha sido atacada particularmente en nuestro país.

 

4.     ¿Qué esperamos los ciudadanos y las empresas? Que los líderes gubernamentales ayuden a la sociedad a navegar y salir fortalecidos de las crisis. Ni más ni menos.

 

5.     No vamos a volver pronto a la situación de 2019. Pero sí queremos que el 2022 y el 2023 sean mejores que lo que estamos viviendo este año.

 

6.     Más allá de ideologías o creencias, el proceso de formulación e implementación de políticas públicas es vital.

 

7.     Los desafíos son urgentes. Con la pademia, la desigualdad, la polarización y la inseguridad crecieron. 

 

8.     Los ciudadanos esperamos que la 4T haga un compromiso con la inclusión y la prosperidad compartida. Pero eso requiere visión y colaboración.

 

9.     La dimensión de la crisis económica es inimaginable. En el mundo se perdieron 493 millones de empleos en 2020. Los más afectados fueron mujeres y jóvenes. El PIB mundial se redujo en un 4.3%. 

 

10.  Para hacer frente a las crisis, la intervención de los gobiernos de los países del mundo fue clave (aunque el gobierno mexicano, desafortunadamente, decidió no hacerlo).

 

11.  ¿Qué hicieron los gobiernos del mundo? Apoyaron a empresas y ciudadanos. Hubo financiamiento directo, inversiones, reducciones de impuestos. Es cierto, en algunos casos, eso tuvo el costo del incremento de la deuda pública.

 

12.  El Banco Mundial pronostica un modesto repunte en 2021, con un crecimiento del 4% en la producción mundial. Pero todo eso depende del éxito de la vacunación COVID-19 a gran escala, de políticas y programas gubernamentales que promuevan el crecimiento del sector privado y reduzcan la deuda del sector público.

 

13.  Los desafíos de la atención médica en 2021 y 2022 serán enormes. La pandemia de COVID-19 nos ha demostrado que existen muchos obstáculos en las cadenas de suministro, la medicina preventiva, la atención primaria y los hospitales. 

 

14.  Durante los próximos meses, los funcionarios de salud pública, apoyados por el sector privado, deberían dar respuesta a las nuevas olas de la pandemia  y a los esfuerzos de distribución de vacunas. Necesitamos que el sistema de salud sea más eficiente.

 

15.  Muchos países del mundo implementaban reformas educativas eficaces antes de la pandemia. 

 

16.  Los estudiantes abandonan la secundaria sin las habilidades necesarias para desenvolverse en el trabajo y la vida. 

 

17.  Los cierres de las escuelas durante la pandemia agravaron el problema. Millones de estudiantes mexicanos están fuera de las escuelas. 

 

18.  El gobierno dijo que se brindaría aprendizaje remoto a los estudiantes, pero los recursos han sido limitados y los resultados han sido desiguales. 

 

19.  Millones de niños están a un paso de la deserción y los que dependían de las comidas escolares sufren desnutrición.

 

20.  El gobierno mexicano debe transformar los programas de educación tradicional y fortalecer la educación para adultos. Para hacer frente al desempleo y estimular la recuperación económica el gobierno debe capacitar a los adultos y mejorar sus habilidades digitales. 

 

21.  El cambio al aprendizaje virtual seguirá su curso. Entonces se debe repensar el financiamiento de la educación, la revisión de los planes y programas de estudio, los nuevos métodos de aprendizaje y la formación continua de los profesores.

 

22.  La delincuencia, incluida la violencia doméstica, los robos y los saqueos, aumentaron durante la pandemia. 

 

23.  Tal vez las políticas de aislamiento, el bloqueo, el desempleo y la desesperación entre los ciudadanos han jugado un papel en la intensificación de estos crímenes y eventos. 

 

24.  La seguridad digital encierra riesgos enormes. La agenda digital del gobierno está en riesgo por los ciberdelitos. Hay nuevos desafíos de seguridad y estabilidad relacionados con la inmigración, la gestión de fronteras y los eventos políticos.

 

25.  El cambio climático avanza y el gobierno tiene que hacer algo. Además de la pandemia, los últimos siete años han sido los más calientes en la historia de la humanidad. 

 

26.  Los eventos extremos relacionados con el clima, incluidos huracanes, incendios forestales, inundaciones y olas de calor, aumentaron a partir de 2020 y no estamos preparados para hacerles frente.

 

27.  Los gobiernos del mundo han establecido agendas climáticas ambiciosas, con compromisos para formular políticas, regulaciones e incentivos para acelerar la descarbonización. México no. 

 

28.  El gobierno debería estimular la inversión de las empresas de energía limpia, la producción sostenible y la infraestructura verde. 

 

29.  La confianza es vital. La desinformación cuesta. La incertidumbre tiene impactos sociales. Si la confianza en los líderes gubernamentales se erosiona, eso influye en las elecciones. 

 

30.  La incompetencia, la falta de claridad en las tareas del gobierno, la ausencia de modernidad en las estructuras, la poca experiencia de los servidores públicos, el trabajo en silos, la falta de colaboración, la disparidad entre las acciones del gobierno federal y los gobiernos de los estados, los nulos resultados podrían agravar la pérdida de confianza. 

 

A principios de 2018 leí un análisis, en el sitio de la BBC, que llamó poderosamente mi atención https://bbc.in/3iACiKs . En el corazón de cualquier democracia, la idea que tenemos es que los líderes se eligen para gobernar. 

 

Ed Turner, investigador de la Universidad de Aston, nos explicaba entonces cómo hay países que se las arreglaron sin gobierno  “¿Realmente necesitamos a los políticos?”

 

A principios de 2017 Irlanda del Norte se encontró sin un gobierno propio. Alemania, en enero de 2018, no había instalado un nuevo gobierno tras sus elecciones federales inconclusas de finales de septiembre. En Bélgica, se estableció un récord para el período más largo sin un gobierno electo en una democracia en 2010-11, después de que las disputas entre figuras flamencas y valonas llevaron a un vacío de 589 días. España pasó los primeros 10 meses de 2016 en una pausa que sólo terminó cuando los socialistas de la oposición votaron efectivamente para permitir que los conservadores formaran un gobierno minoritario.

 

La lección es que, aunque parezca algo extraordinario, la ausencia de liderazgo político no ha provocado el colapso de los servicios públicos y la gente puede realizar sus actividades cotidianas normales. La buena noticia es que no hay razón para creer que la sociedad se derrumbará. Es triste, pero, como escribe Ocaranza, para convencer al gobierno, quizá haya que esperar a uno nuevo.

 

https://www.sdpnoticias.com/opinion/javier-trevino-habra-espacio-para-las-nuevas-ideas/